Afueras de Seúl. Zona de reuniones
6:45 pm.
Si bien, el mancharse directamente las manos de sangre, nunca había sido una de las características que tenían aquellos Killer's a la hora de confrontar a un enemigo, era bien sabido que cuando la ocasión lo ameritaba, ese pequeño aspecto no era un problema.
Mirando aquella escena, donde Jimin y Tae mantenían una mirada sombría mientras sus manos, manchadas de un espeso líquido carmín, sostenían una exquisita cuchilla platinada, sin apartar la vista de Taemin... fácilmente podía erizar la piel de cualquiera, aún más si se tenía en cuenta todo el escenario que se alzaba detrás, con los múltiples cuerpos esparcidos por el suelo, dejando que la sangre saliera de sus gargantas previamente mutiladas, creando inmensos charcos que llegaban a los zapatos de los que aún se mantenían de pie.
Ante aquello, ninguno de los alfas presentes podía decir exactamente en qué punto las cosas se habían tornado así, cómo era posible que sus Omegas hubiesen perdido el control de aquella salvaje manera, dejando que su lado más feroz e incontrolable dominara todo su ser, nublándoles la vista con una fría capa sin ápice de remordimiento....
No lo sabían, pero sin duda era una de las cosas que más les fascinaba de ellos.
*Cuatro horas antes*
Todo inició algunas horas atrás, desde que cinco de los siete Killer's habían puesto un pie fuera de aquellos lujosos autos negros, analizando la estructura sencilla pero imponente que se alzaba en lo más profundo del bosque.
Los hombres que vigilaban la única entrada a aquel lugar, habían abierto las puertas con distintos códigos tan solo al verlos llegar, permitiendo que el grupo ingresara y comenzasen a caminar por entre los pasillos sombríos totalmente grises hasta llegar al único elevador, mismo que solo tenía una sola dirección. Hacia abajo.
Por algunos segundos, el grupo no intercambió palabra alguna, dejando que el sonido tranquilo del ascensor fuese el único en el aire, al menos hasta que las placas platinadas se abrieron, dejando a la vista la puerta de metal oscuro al final del corredor, misma por la que múltiples lamentos, gritos y sollozos se ahogaban al traspasar el duro material.
-¿Se divierten tan temprano?- preguntó Jeon una vez que estaba a unos cuantos pasos de los hombres que custodiaban el pórtico, mismos que solo asintieron con una sonrisa.
-Han estado muy animados desde ayer
En ese momento, un nuevo grito se alzó detrás de la puerta, haciendo que todos volvieran la mirada ese lugar a un sellado, imaginando lo que posiblemente ocurría.
-Bueno... me parece que solo emocionados no es la palabra- comentó con gracia Yoon-gi, siendo seguido de Hope.
-Pero vamos a ver...- empezó a hablar el peli-negro- No hay necesidad de ser tan crueles. Los matarán antes de que tan siquiera podamos verlos
Tras las palabras, Hope se movió hasta el frente del grupo, observando como sus hombres colocaban las manos en cada cerradura y la bajaban para lograr abrirla.
-Para nada, señor. Nunca haríamos eso- aseguró el segundo hombre de mirada jade- Solo es una pequeña bienvenida. Tal y como lo pidió el Sr. Jeon
Y con esas últimas palabras, el metal cedió a la fuerza, dejando a la vista de todos, el escenario que se armaba dentro de aquella sala.
-Vaya bienvenida- susurró Suga a la par que seguía a Hope.
-Bienvenida digna de nosotros- secundó Jeon, permitiendo que Jimin se colocase frente a él y el grupo entero se adentrara al lugar.
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🄱🅁🄾🄺🄴🄽 🅁🅄🄻🄴🅂 🄸🄸 Ⓛⓐ Ⓕⓘⓔⓢⓣⓐ
FanficHabían jurado tantas cosas tras tanto dolor, que lo único que esperaban a partir de aquello, era obtener libertad en su retorcido y escabroso mundo. Disfrutar y embriagarse en la continua fiesta de adrenalina que era su vida... pero nunca lograron p...