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Capítulo 23 ¿A que juegas?

Lo que había ocurrido en los minutos posteriores a aquel horrible momento, pasaron como un rayo ante la vista de Jimin, quien, al estar esperando fuera de la habitación, donde algunos médicos revisaban a Jin, simplemente se desplomó en la silla, comenzando a llorar mientras Tae lo envolvía con sus brazos.

-Van a estar bien, Minie. No llores...

-No sé qué haré si les sucede algo- sollozó- Le prometí que estaría con él y ...

-Estamos aquí, Jimin. Pudimos traerlo a tiempo. Él estará bien, solo...

-¡Jimin!

La profunda y desesperada voz tan conocida para ambos Omegas, logró hacer que levantasen la mirada, topándose con los cuatro Alfas que llegaban de frente, siendo liderados por Nam-joon, quien corría hacia ellos.

-¿Dónde está Jin?

-Está adentro. Los médicos lo están revisando- respondió el peli-rosa en medio de un sollozo- No nos permiten pasar...

-¿Qué ocurrió?- preguntó Hope, sintiendo como Tae se envolvía entre sus brazos, escondiendo el rostro en su pecho a la par que un hipido escapada de sus labios.

-No lo sabemos. Habíamos hablado minutos antes con él y parecía que solo estaba estresado por no poder salir, pero...cuando llegamos, Jin no nos respondía...- explicó de forma triste el peli-rosa, sintiendo como Jungkook lo envolvía en un abrazo, buscando tranquilizarlo.

-Jimin lo vio en uno de los pasillos y ya estaba así... No sabemos que ocurrió. Nadie ingresó.... No sabemos que pudo haber pasado

Viéndose totalmente acorralado por la situación, Nam-joon comenzó a caminar de un lado a otro en el pasillo, sintiendo a los pocos segundos, una fuerte punzada en su costado, misma que le hizo detenerse mientras guiaba su mano a aquella zona, ejerciendo un poco de presión al notar la herida aún abierta.

-Nam-joon...- susurró Suga al alejarse del grupo, caminando de forma discreta hasta el Alfa mientras hablaba- ¿Te encuentras bien?

Sin decir nada, el pelinegro solo apartó su mano de la herida que atravesaba su piel, ligeramente por encima de su cadera, donde la sangre ya había humedecido su playera oscura.

-Deberías de ir a que suturen la herida. Estás sangrando demasiado

-No me pienso mover de aquí hasta saber cómo está Jin

-Nam...

-No lo haré

Cuando aquel gruñido se desprendió en una clara amenaza, la puerta de la habitación donde minutos antes había ingresado Jin, fue abierta, dejando ver a la enfermera y el par de médicos que habían ingresado junto al Omega, mismos que llamaron la atención del grupo hasta el punto de tenerlos encima en cuestión de segundos, preguntando por el estado del menor.

-Jung-su. ¿Cómo está Jin?- se apresuró a preguntar Nam-joon, haciendo que la mirada del rubio recayera en él en medio de una negativa molesta.

-Les voy a pedir que traten de calmarse, sobre todo tú, Nam-joon. Sus feromonas están creando un ambiente bastante tenso para Jin, quien necesita tranquilizarse. Tú, siendo su Alfa, debes de crear un ambiente de comodidad, no asustarlo más- comentó el médico bajo la mirada preocupada de todos, aunque notando como las feromonas poco a poco iban disminuyendo- Jin se encuentra bien, está dormido justo ahora. Administramos algunos medicamentos en conjunto con un tranquilizante ya que despertó bastante alterado

-¿Qué ocurrió? ¿El bebé está bien? - cuestionó Jimin, sintiendo su pulso acelerarse en espera de una respuesta.

-El cachorro está bien. El sangrado se debió a un ligero desprendimiento en la placenta. La presión de Jin era demasiado alta y eso lo provocó. Afortunadamente logramos estabilizarlo y detener el sangrado. Ahora está mejor- explicó Jung-su, recibiendo un suspiro como respuesta- ¿Ocurrió algo? Una pelea, alguna discusión fuerte....