❤️ Capítulo 24. Entrada secreta ❤️

386 26 0
                                    

Reepicheep realizo un ademan para que sus compañeros a la reja, pasaron por los pequeños huecos adentrándose al castillo, se acercaron a la pared que dejaba ver el patio en común. Dieron una mirada al cielo, observaron como los grifos sobrevolaban  llevando consigo a los reyes de antaño junto al sucesor del trono de Telmar.

Peter paso al lado de la torre donde su hermano menor estaba realizando las señas con su linterna, los animales con plumas extremadamente sedosas cayeron en picada acercándose a la siguiente torre. Caspian estaba a la cabeza del grupo, desenvaino su espada y con su mano izquierda se sujetaba a las patas del animal, cuando estaban cercas un guardia los vio pero el chico de cabello oscuro era extremadamente hábil y le proporciono un golpe con la espada. 

 El guardia no logro esquivarlo y termino cayendo por el vació.

— Buen golpe Alago Peter causando que el chico sonriera

Caspian agarro la otra pata del animal, tenia que admitir que cuando le dijeron que entrarían por aire mediante estos animales estaba inseguro pero extrañamente se sentía tranquilo aunque la posibilidad de caer esa mucha. Estuvieron dando vueltas por las torres de vigilancia eliminando con flechas o por medio de las espadas a los guardias que veían, estaban cerca de una torre cuando Edmund estaba dando la señal.

Los ojos grises de Sussan notaron que uno de los guardias estaba apuntando con su arco a su hermano, rápidamente tenso el arco y disparo dando con su objetivo quien cayo al suelo con un ruido sordo. El soldado que estaba detrás de el caminando se asusto, en ese momento saco s espada y Peter descendió con la suya.

Un solo golpe, ese fue lo único que necesito para dejarlo muerto.

Susan aterrizo con su arco extendido, seguido de ella ese encontraba el príncipe junto a el enano de cabellos rojizos. Edmund observo desde la distancia junto a Thomas, el chico se coloco en la orilla y miro de reojo al Rey.

— ¿Estarás bien sin mi? — Dijo

— ¿A dónde te piensas ir? 

— ¿A donde cree su majestad? — El joven giro sobre sus talones

Edmund pensaba que estaría con su hermana, arrugo la nariz porque no era le gustaba la idea que hombres se acercaran a sus hermanas porque sentía que nadie las merecías. El chico rápidamente negó con su cabeza, llevo dos manos dedos a su frente antes de moverlos y dejarse caer al vació.

El chico se acerco para comprobar que dos grandes alas de color ocre estaban frente a el, antes de caer en pinada. Thomas paso de largo donde estaban sus dos hermanos mayores, siguió su camino fuera de las murallas.


En las calles cercanas del castillo un minotauro con una haya estaba detrás de unas columnas, sus pasos eran sonoros en esos momentos causando que su victima girara sobre sus talones alumbrándolo con una antorcha que tenia en la mano derecha, se quedo contemplándolo en silencio durante unos segundos. 

— ¿Esta cosa es real o acaso tome mucho vino antes del cambio de turno? — Se pregunto a si mismo

El centauro dio un paso causando que se alarmar. Definitivamente lo que estaba mirando era real y de manera rápida saco su espada dejando que descansara en su mano izquierda pero el centauro llevo una mano a sus labios realizando una señal de silencio causando que este hombre se confundiera volviendo a pensar que estaba alucinando.

Estaba apunto de hablar para preguntar a sus compañeros si lo que sus ojos veían era real, pero un golpe en su cabeza causo que cayera desmayado. Nicabrick estaba detrás de el, divertido al ver que había caído tan fácilmente. 

Narnia: La sirvienta [Caspian y Tú]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora