Epílogo

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—HADES DIMUN.—

#35.

«10 años después.»

ׅ ׅ ۫ .

He tenido la dicha de venir a verte, después de tu ida.
Un hueco en mi corazón queda siempre, al igual quema cuando te recuerdo. Las noches son demasiadas frías, y tristes.

Ya es diciembre, el día que te conocí, el mes tan bonito que tuve en mi vida. El día que te vi pasar en esa bicicleta, en el parque. Mientras de observaba, llegaste como si nada en ese lugar bajo el árbol, fui grosero contigo. Pero no sabía como expresarme.

Eras la chica de mis sueños, me has gustado desde que salías de tu casa con juguetes nuevos, en búsqueda de Mack.
No sabía, tu pasado. Y no quería preocuparte por lo que pasaba. Cada golpe que recibía de Robert, me hacía más fuerte en recordar tu sonrisa. Tú eras mi luz en plena oscuridad. Recuerdo el último día que nos vimos.

El último día, que te podría tener en mis brazos, por que no sabía que seria un simple adiós.

Un adiós que dejaría huecos en todos lados, y el más profundo recuerdo que tendríamos. El último día, que sería un para siempre.

Estoy en búsqueda de tu lugar, observando el lugar vacío, pequeñas fotografías que están colgadas en tu tumba. Flores al tu alrededor, y algunas velas que seguían prendidas aún.
Tome asiento aún lado de ti dejando tus flores favoritas. Margaritas.
Mientras aún lado, decía la fecha.

15 de Noviembre del 1996
al
24 de Diciembre del 2015

-Estarás Siempre en nuestros corazones, de parte de tu familia para Alysa.

No podría respirar, con tanta presión, que tenía al estar cercas de ti después de diez años. Ahora me he armado de valor para venir a contarte todo lo que a pasado.

—Hola Makri.—dejé las margaritas aún lado— tanto tiempo.

Me quede viendo su tumba por algunos minutos, mientras mi garganta se asía un nudo.

—He venido, para recortarte que es diciembre, el día que nos conocimos en el parque—solté una risa— el mes más especial del año que tengo. Bueno, durante estos años. He estado avanzando como tú me lo pediste.

Suspiré y giré mi cabeza asía el cielo, avía un poco de sol. Algunas nubes avanzaban. Sabía perfectamente que no está listo, para esto. Pero tenía que avanzar para contarle. Giré mi cabeza y comencé hablar.

—No e venido, a verte.—se hizo un nudo en mi garganta— por que soy un estupido cobarde, estos años que me aleje y no vine. Fue por que estuve, avanzando—sentí pequeñas logras por mis mejillas— me e casado. Y tengo dos maravillosos hijos. Son mellizos, ambos son lindos.

Deja que pequeñas lagrimas salieran de mi. No podía contenerlos más, estaba enfrente del amor de mi vida. Diez años sin ella fueron difíciles, y seguirán siéndolo.

—El niño, se llama Hack, su madre dijo que era lindo. Así que lo acepte llamarlo así, pero yo coloque el nombre de la Niña—susurre—es difícil todo esto. Avía algunos detallen en su nombre, y me decidí llamarla Alysa. Lo hablé con Tamara, ella acepto, en ponerle ese nombre.—pase mi mano por mi mejilla— es un lindo nombre. Ahora me e casado, y e tenido una familia, con Tamara, pero lo que más que me duele, es no a verla tenido contigo después de todo.

Aroma a Diciembre[✔️] EDICIÓNDonde viven las historias. Descúbrelo ahora