eighteen | Kim Taehyung

Capítulo 53

Jungkook

-Sonará extraño, pero me alegro de que no vayan a cenar hoy con tu padre -le dijo a Seyeon con emoción mientras me echaba una rápida mirada-. Sólo así tuvimos una oportunidad de que me cuenten que tal les va en la escuela.

Mi papá caminó por delante con Seyeon siguiéndolo por detrás para ir a la sala mientras seguían conversando.

Las bellas flores que traía Seyeon para mi padre cada semana eran las únicas que se veían dentro de la casa y eso se debía a que a mi papá le encantaba que Seyeon escogiera el tipo de flores que adornarian la casa.

-¿Y a Sukjae que tal le va en su empleo?

-Bastante bien -mencionó Seyeon al darse cuenta de que yo no había contestado-. Estos días está más emocionado de lo normal por alguna razón.

-Me imagino que debe de ser por la temporada -llegamos a la sala principal por fin, Seyeon y yo fuimos a sentarnos en el sofá más largo mientras que mi padre se sentó en el sillón de a un lado-. hay más turismo estos días así que debe de estarle yendo muy bien.

-Jungkook fue a verlo en la semana y dijo que había visto a muchísima gente, ¿verdad?

Seyeon de nuevo y como cada semana lo hacía, intentaba meterme en la conversación cuando pasaba demasiado tiempo sin pronunciar ni una sola palabra.

-Si, y la mayoría eran extranjeros así que tienes razón papá -contesté.

Ya quería irme, hoy definitivamente no estaba de ánimos para venirme a hacer el buen hijo delante de mi padre.

Quería que pasara rápido el tiempo para así poder ir a casa de Seyeon, me gustaba más estar ahí. Su papá hacía comentarios sobre nosotros que me gustaba escuchar, además de que no era para nada incómodo entablar una conversación con el señor Park.

Pero con Seyeon era todo lo contrario, parecía ser más cercana a mi padre que al suyo. Y mi papá estaba encantado con ella por que le encantaba hablar y Seyeon era buena escuchando y agregando preguntas y comentarios importantes.

También hacía lo mismo cuando había alguna cena a la que tuvieramos que asistir. La facilidad de palabra que tenía Seyeon para con los demás, creaba siempre un buen ambiente.

Y amaba que la gente en las cenas a las que asistiamos me miraran como si fuera el chico más afortunado del mundo por tener una novia tan hermosa en todos los sentidos... aunque sólo fuera una mentira que los demás suponían.

-... y ni que decir de nuestra vecina la señora Kim, sigue siendo igual de cotilla que siempre.

Mi papá sonrió ampliamente antes de soltar una carcajada.

-Ya me lo puedo imaginar. Una vez cuando fui a dejarles...

Me estaba aburriendo en serio, y no por mi papá ni por la plática que estaban teniendo. Si no por que ayer había dormido poco y estaba sintiendo mis ojos hacerse más pesados por el poco ruido que había en mi casa a excepción de las dos personas que conversaban a mi lado.

Moví mi mano apresurado cuando sentí como caía descuidadamente por mis piernas y la pasé por encima de mis muslos para que no anduviera colgando como si nada.

Pero la yema de mis dedos rozó la cintura de Seyeon y vi claramente como ella de repente se sacudió un poco ante el toque. Ni siquiera lo hubiera notado de no ser por que le había puesto más atención.

Muy discretamente y cuidando de que mi papá no se diera cuenta, moví más la mano hacia ella hasta que estuviera oculta de su vista y moví mi pierna de arriba a abajo con rapidez.