¡Mew eres un idiota! Finalizada....

Canción de cuna

Mew regresó a casa con dos grandes pensamientos en su mente: el primero era que realmente era el padre de cinco niños hermosos y el segundo era que posiblemente Gulf no querría verlo ni en pintura.
Ohm caminó junto a él en silencio, solo tomando sus manos cuando tenían que cruzar y sin replicar ni comentar nada, más que enfadado parecía triste, incluso cuando le habían sacado sangre no había hecho más que una mueca rara, quería pedirle disculpas pero no era Gulf, él nunca había sabido encontrar las palabras adecuadas para estas situaciones.

— Llegamos...— dijo el mayor observando al pequeño Ohm— ¿Quieres algo de tomar?

— No...—

Ohm se marchó escaleras arriba, posiblemente iría en busca de Gulf, suspiró, sus mejores aliados también estaban molestos con él, siguió a su pequeño y empezó a revisar las habitaciones, supuso que todos estaban donde Gulf pues no los encontró en otro lado, escuchó una suave melodía provenir de esa habitación rosa, no era la voz de Gulf, pero sin duda esa era la canción que Gulf siempre le cantaba para tranquilizarle.

— "Yo te protegeré de tus miedos, soy tu Príncipe azul"— Mew se dejó arrullar por la suave voz que provenía de la habitación de Gulf— "Ángel del cielo, no hay más que temer, hoy como ayer me vas a tener"

Se escuchó un ligero sollozo y unos cuántos hipidos, Mew sintió su corazón encogerse mientras se pegaba un poco más a la puerta para poder escuchar.

— No llores, Fluke— ese era su pequeño copito de nieve, podía distinguir su tono de voz en cualquier lugar— No quieres hacer llorar a Dome y Gun ¿Verdad?

—"So-solo importa tu amor, dámelo, aquí estoy"— era otra voz, un poco más gruesa y calmada— "La fuerza mayor está en el amor, es interior, la meta es darlo, deberás mostrarlo sin razón, con el corazón"

Mew ingresó en la habitación para encontrarse otra tierna escena, Gulf dormido con Pavel en brazos, ambos con trapitos húmedos en la frente mientras el pequeño Dome dormía plácidamente entre los brazos del pequeño alíen.
Fluke estaba escondido entre los brazos de Ohm e hipaba suavemente mientras su hijo mayor lo abrazaba y murmuraba algo en su oído.

— ¿Gulf está bien?—

— Tío Win se fue hace un rato y dijo que volvería con algo de comida— soltó con inocencia Fluke— Phi Gulf no se ha estado sintiendo bien y Pavel tampoco

Mew tocó la frente de Gulf y suspiró, estaba caliente, luego tocó la del pequeño pelirrojo pero este tenía una temperatura normal, lo liberó de los brazos de su mejor amigo y lo acunó entre sus brazos, su hijo se veía tan frágil entre sus brazos, sintió miedo, como si fuera la primera vez que lo sostuviera, como si su pequeño en realidad fuera un recién nacido y esta su primera cargada, sintió miedo de romperlo como todo lo que tocaba.

— ¿Win estuvo aquí?— preguntó mientras acomodaba a Pavel junto a Dome en la otra coma que habían instado en esa habitación— ¿Dijo algo?

— Dijo que conversaría contigo, appa— murmuró Gun distraído— Y que eres un idiota.

— ¿De verdad?—

— Sí, pero mamá lo dijo primero— explicó sonriente— Mamá gritó "Mew eres un idiota" cuando te fuiste con Ohm y lloró un largo rato, luego llegó tío Win y trajo dulces, muchos dulces para Dome y para mí

— ¿No le trajo dulces a Fluke y Pavel?— gruño molesto— ¿Qué se ha creído?

— A Fluke y Pavel les trajo los panquesitos que les gustan— contestó el pequeño alíen— Phi Win es muy bueno con nosotros

Win sabía más de sus hijos que el mismo, chasqueo la lengua con impaciencia y se sentó junto a Gulf, realmente lucía muy cansado, le cambió el trapito y se quedó observándole un largo rato.

— ¿La canción?— Ohm le miró con algo de rencor— ¿Se las enseñó Gulf?

— Mami nos enseñó esa canción hace años—

— Esa canción solía cantármela Gulf hace muchos años, cuando éramos niños y no podía dormir— recordó Mew taciturno— Quizás su madre la aprendió de él, realmente me gusta esa canción.

— ¿Te la sabes, papi? —

Mew tomó a Gulf entre sus brazos mientras le daba suaves masajes en la cabeza y los pequeños se acomodaban en la cama de nuevo.

— ¿Puedes cantárnosla, papi?—

No tenía la mejor voz, ni siquiera recordaba muy bien el tono pero la letra, la letra claro que se la sabía, Gulf se la había cantado tantas veces que había quedado grabada en su memoria.

— "Yo te protegeré de tus miedos, soy tu príncipe azul"—

Gulf se acomodó entre sus brazos adormilado mientras sonreía levemente, Mew le imitó, le gustaba ver sonreír al menor, entonces comprendió que la canción en ese preciso momento no era para sus pequeños hijos sino para su mejor amigo que dormía plácidamente entre sus brazos.

— "Ángel del cielo, no hay más que temer, hoy como ayer, siempre me vas a tener"—

Claro que siempre lo tendría, lo habían jurado de pequeños, serían amigos hasta que se alguno de los muriese, e incluso si uno moría el otro seguiría conversándole a su tumba, habían jurado que su amistad sería eterna y haría lo que sea necesario para cumplir esa promesa.

— "Solo importa tu amor, dámelo, aquí estoy"— la voz suave de Fluke se acopló a su cántico—"La fuerza mayor está en el amor, es interior"

Mew siguió cantando un rato más, incluso después de que sus hijos se quedaran dormidos, siguió cantando mientras arrullaba a Gulf, el menor empezó a despertarse de a pocos, reconocía esa voz en cualquier lado, fingió estar dormido un poco más, le gustaba el mar de sensaciones que su mejor amigo desataba en él.

— "Yo prometo que te cuidaré y para amarte solo viviré, cuando triste estés ahí estaré"—

Gulf sonrió y se acurrucó levemente en el menor mientras suspiraba y cantaba en voz baja.

— "Con este inmenso amor que yo siento por ti y nunca lloraras, tú serás lo único"—

El destino suele ser muy cruel, pensó Gulf, porque mientras el sentía y comprendía cada parte de la canción, Mew solo la veía como una canción de cuna para sus hijos.
Hijos de Mew con otra chica en un futuro en el que Gulf ni siquiera era amigo del chico Suppasit.
Definitivamente el destino era un hijo de perra con él.