¡Mew eres un idiota! Finalizada....

Verdadera Madre

Las cosas mejoraron mucho después de ese día, Mew pasaba más tiempo con sus hijos y los llevaba a todos lados, a casi todos, los menores se negaban a separarse de su mejor amigo, sin duda había tenido una larga conversación con Win, el muy arrogante castaño le había amenazado de muerte, si volvía a hacer llorar a Gulf dejaría a sus cinco hijos sin padre, pero a Mew eso no le preocupaba, estaba seguro de que Gulf no volvería a llorar en un buen tiempo.

— Niños, ella es Phi Carolina— la chica les sonrió a los pequeños— Una muy buena amiga

Ohm y Pavel se miraron entre sí confundidos, a simple vista se podían notar las coincidencias entre la chica y los dos pequeños niños, Mew no necesitaba ser un genio para hilar las cosas, era demasiado coincidencia, además la chica era súper fan de 2NE1, Sistar y un montón de grupos de chicas como su segundo hijo y comía de forma graciosa como Dome.
¡Era ella! ¡Sería un tonto si no se diese cuenta de lo obvio!
Pero sus hijos no parecieron contentos de verla, ni siquiera sonrieron.

— ¿Podemos ir a casa?— preguntó Ohm con una mueca— Phi Gulf debe estar preocupado

— Si...— Carolina le regaló una mirada muy coqueta— ¿Quieres venir con nosotros, Caro?

Esta vez fue el turno de Pavel de hacer un pequeño berrinche, esa chica no le agradaba mucho ni en el presente ni en el futuro pero tampoco podía contradecir a su padre, se mantuvo en silencio todo el camino a casa, su padre reía demasiado y los ignoraba igual.
Gulf estaba en casa, hacía un delicioso almuerzo mientras Fluke y Gun entretenían a Dome con sus bromas, escuchó la puerta abrirse, copito de nieve y el pequeño caballito corrieron hacia el castaño para envolverlo en un abrazo mientras Mew entraba conversando con alguien.

— Caro, te presento a Gulf, mi mejor amigo—

Gulf sonrió, estaba acostumbrado a este tipo de situaciones, siempre sería el mejor amigo y nada más, la chica le devolvió la sonrisa con algo de coquetería pero no le prestó atención, Dome no paraba de llorar y llamarlo a gritos.

— Iré...iré a ver la comida— se disculpó el castaño— Con permiso

Una reverencia y pasos apurados hacia la cocina, tomó a Dome en brazos y lo paseó por el lugar mientras probaba la comida, no debía perder los estribos, solo era otra conquista pasajera, no tenía por qué ser la madre de estos adorable niños.

— Gulf, Gulfy—dijo Mew entrando a la cocina con una enorme sonrisa mientras cargaba a Gun— La encontré, Gulfy

— ¿A quién?—

Gulf rezó internamente para que Mew no dijera lo que creía que diría.

— ¿Te acuerdas que te conté de Carolina?— preguntó entusiasmado mientras el mayor asentía— La estaba conociendo, comprobando algunas cosas

— ¿Comprobando qué?—

— Gulfy, ella es tan blanca como Ohm, le gusta las SISTAR como a Pavel, canta hermoso como Fluke, le gusta el espacio como a Gun y come igual de bonito que Dome—

— Mew...—

— ¡Es ella, Gulf!— suspiró zarandeando al castaño— ¡Es la madre de mis hijos!

Gulf se tambaleó un poco, un nudo se formó en su garganta, las lágrimas amenazaron con salir pero solo consiguió sonreír a medias.

— ¿Estás seguro?—

— Claro que sí,—

Ambos chicos voltearon a observar a Pavel, el niño retrocedió incómodo mientras Mew avanzaba hacia él con una enorme sonrisa.

— ¿Carolina es su mamá, verdad?—.

El pequeño semipelirrojo asintió confundido, Mew festejó con un extraño baile mientras Gulf bajaba la mirada para ocultar una lágrima rebelde.

— ¿Estás llorando, Gulfy?—

— ¿Ah?— se secó las lágrimas rápidamente— Claro que sí, tonto, mi mejor amigo ha conocido al amor de su vida, estoy emocionado

— Gulfy siempre tan sentimental y bueno conmigo— siguió festejando mientras saltaba con Gun en brazos— Es realmente bonita, ya sé porque tuvimos cinco hijos

— ¡Mew!—

— Lo sé, lo sé, los niños no deben escucharme ser pervertido— dijo con falsa voz seria— Pero has visto sus curvas, esa chica está que arde, Gulf

Dome era pequeño pero no tonto, podía sentir la tristeza del castaño, quiso callar a su padre y fingió molestia para que Gulf lo llevara a otro lugar, Fluke se coló en su huida mientras cantaba una canción pegajosa de Bigbang.
¿Acaso nadie notaba que mami quería llorar?
Mami lo acostó en su camita, le cantó la canción de cuna que tanto amaba y se quedó con él hasta que empezó a dormirse, incluso en medio de sus sueño podía sentir a mami arrullándolo.
Dome realmente amaba a mami.

— Gulf...—

— Baja la voz, Dome está durmiendo

— Gulf, necesito tu ayuda—

— ¿En qué?—

"Que no lo diga, que no lo diga" repitió en su mente avergonzado.

— Yo no soy muy bueno ligando— empezó Mew — Y esta chica realmente me gusta

—...

— Sería genial que me ayudaras a conquistarla, Gulfy— pidió sonriendo dejando a la vista sus bellos hoyuelos— ¿Lo harías, Gulf? ¿Me ayudarías?

¿Su felicidad o la de Mew? Lastimosamente Gulf nunca había sido egoísta y sabía cuándo una batalla estaba perdida, no podía arruinar una familia, simplemente no podía hacer nada más que sonreír y ayudarle.

— Siempre, Menwi—