Mew

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Mew Suppasit solía tener una vida monocromática, sin emociones, con padres adinerados pero sin tiempo para él.
No era raro que se volviera un rebelde, lo que sí fue extraño fue que hiciera del chico bonito y callado su mejor amigo.
Nadie entendía esa amistad, eran dos polos opuestos caminando juntos por la vida, y aunque todos insistían en que Gulf debía alejarse de Mew, el pequeño no lo hizo.

— La sal, Mew— murmuró Gulf sonriente— Pásame la sal

Mew le alcanzó un pequeño pote vacío de azúcar, Gulf lo tomó sin revisar y se dispuso a echarla en su olla, pero nada cayó.

— ¡Mew!—

El castaño agitó el envase hasta que un ruidito metálico lo sorprendió, revisó la etiqueta y suspiró volviéndolo a poner en su lugar.

— Eso era azúcar, Mew— dijo frustrado—De todas formas, no hay azúcar en ese pomo

Gulf se paseó por la cocina con el ceño fruncido mientras buscaba la sal, los pequeños habían salido con Win y Earth a una fiesta para niños mientras que ellos habían quedado a cargo de la comida.
Mew suspiró frustrado, era su cuarto intento en la semana, definitivamente Gulf era muy distraído o realmente no quería aceptar el compromiso.

— ¿Pasa algo, amor?—

Mew negó y se marchó de la cocina para preparar el siguiente plan, quizás si escondía el anillo en un libro o en su álbum de SNSD.
Sí, ese era un buen plan.

— ¡No te lleves ese envase, Mew!— chillo Gulf cruzándose de brazos— ¡Mew regresa aquí con ese envase! ... ¡Suppasit!

Pero ni siquiera le escuchó, se distrajo encerrándose en la habitación del menor para buscar algo donde ocultar el anillo.
Win había dicho "que sea especial, Suppasit, o voy a matarte, lo juro" y tenía razón, debía ser especial y digno del castaño pero se estaba quedando sin ideas.
Le ofreció el anillo atado en un globo pero no contó con que Dome se lo quitaría e huiría con Gun y el anillo.
Se lo ofreció suavemente por la noche mientras miraban las estrellas pero Gulf al momento de abrazarlo había hecho que el anillo se deslice hacia la ventana y había acabado buscando toda la noche el anillo en el jardín.
Lo metió en la comida y Ohm casi se lo come.
Le pidió matrimonio a través de la radio y dejó el anillo en la ventana pero Pavel cambió la estación para escuchar a las SISTAR y el anillo acabó rodando en la carretera.
¿Acaso el destino no quería que le propusiera matrimonio?
Bien, se habían saltado muchos pasos, se habían besado muchas veces, cuidaban de sus hijos y estuvieron a punto de hacerlo en su habitación anoche, y definitivamente no tenían una relación de novio/novio(uke) pero joder, quería proponerle matrimonio y nada salía bien.

— ¡Mew Suppasit, baja en este instante!—

— Estoy ocupado— respondió agitado mientras buscaba un álbum o algo de SNSD— Ya-ya vo-voy

— Espero que no estés haciendo cosas asquerosas en mi habitación, Mew Suppasit— chillo frustrado— O vas a sentir mi cuchara por todo el cuerpo

— Cla-claro que n-no pri-princesa—

Escuchó al menor hacer una rabieta y luego irse, genial, fingir hacer cosas cochinas siempre hacían que el menor se marchara avergonzado, esa era una de las ventajas de conocerlo al revés y al derecho.

— ¿Dónde voy a esconderte anillito?—

Revisó todos los cajones hasta que un álbum de fotos llamó su atención, le recordaba algo pero no sabía que con exactitud.
Lo tomó en sus manos y jugó con él un largo rato antes de animarse a abrirlo, bien, él tenía un álbum sin usar similar a ese en su habitación, quizás en el futuro halló un uso genial para eso, revisó el nombre de la portada y sonrió.
Con Gulf todo era mejor.
Le había tomado diez años comprenderlo pero joder, ahora todo tenía sentido, era feliz y tenía un brillante futuro por delante.
Fotos, muchas fotos, jamás imaginó divertirse tanto viendo algunas fotos.
Al menos en el futuro, Gulf era su esposo y por lo que se veía, eran muy felices.
Bien, Win no era del todo un inútil, era muy majo y sus dibujos sin duda eran lindos.

— Aish, estúpido castaño—

Sí, se parecía mucho a Win, en algunas fotos parecían hermanos y sin duda, estaban demasiado cerca uno del otro, luego veía fotos con sus hijos y no podía evitar suspirar.
Ohm nunca se había visto tan feliz, excepto tal vez esa vez cuando Gulf pasó todo un día solo con él.

— ¿Cómo conseguiste este álbum, princesa?—

Demasiadas fotos bonitas lo distrajeron, solo podía fijarse en Gulf y sus hermosas sonrisas, ni siquiera noto que Dome nunca pasaba del año de edad en las fotos.
Y cuando llegó a la última foto no comprendió nada.
¿Estaban en una boda? ¿Por qué se veían tan mal? ¿Y Gulf?

— No...— susurró regresando en las fotos— No, no...

Sacó la foto del álbum con delicadeza y la sostuvo entre sus manos un largo rato sin atreverse a leer lo escrito por Win tras la foto.
No quería llorar, debía ser una broma, Gulf no podía...

"Descansa en paz, viejo amigo, cumpliré mi promesa, descuida"

No, no...
Mew guardó el álbum de nuevo en el cajón y se quedó congelado observando la habitación rosa.
Toda su vida era tan Gulf ahora, toda su vida era Gulf desde los diez años en donde se atrevió a empujarle, ser perdonado y volverse su amigo.
No quería otro amor, no quería otro mejor amigo, no estaba preparado para perder a la única persona que en realidad amaba.
El anillo brilló suavemente entre sus manos, se limpió las lágrimas rápidamente y salió de ahí con una sonrisa enorme en el rostro.

— Justo iba a llamarte— dice Gulf sonriéndole con cariño, extrañaría eso— La cena está lista, amor

Pero Mew solo le toma de la mano para arrastrarlo hacia la sala, le coloca su abrigo y lo arrastra al auto.

— ¿A dónde vamos, Mew?—

Realmente no sabe a dónde van, solo quiere salir de casa, pasear y olvidarse de lo que acaba de enterarse, no quiere perder ni un segundo, siente que le van a hacer falta en el futuro.

— Cásate conmigo, Gulf—

— Claro que sí, Mew— murmura alegremente— Ya hemos hablado de esto, no vamos a tener hijos fuera de un matrimonio

— Ahora, cásate conmigo ahora—

— Que dices...— Gulf suelta una risita— No tenemos anillos, ni estamos vestidos correctamente, ni tenemos testigos y es tarde...

— Gulf, por favor, se mío siempre—

Gulf Kanawut no entiende muchas cosas, pero solo asiente mientras ve al moreno llorar entre sus brazos, están perdidos en la carretera y sin embargo, ninguno quiere regresar a casa, están bien juntos.

— ¿Pasa algo, Mew?—

Un bello anillo dorado se desliza en su dedo, Gulf agranda los ojos confundido mientras Mew lo llena de besos.

— ¿Mew?—

— Se mío esta noche, Kanawut—

¡Mew eres un idiota! Finalizada....Donde viven las historias. Descúbrelo ahora