You're my hope (HopeV)

37

Un nuevo día comenzó, sin embargo, todo marchó casi del mismo modo que el anterior, con Taehyung sobre su cama -en reposo- siendo atendido por Hoseok, pero a diferencia del día anterior, ambos estuvieron completamente solos. Sin dudas esto había sido extraño para los dos, no estaban acostumbrado a estar juntos y eso los hacía sentir raros, sobre todo en los momentos de silencio. Era incómodo, pero a la vez no, algo un poco contradictorio, mas así era. Ambos se sentían a gusto de compartir esos momentos juntos -incluso cuando no decían nada- pero ninguno quería estar en silencio. Se sentían intranquilos al pensar que el contrario pudiera sentir incomodidad por esto.

Por suerte, esto con las horas fue cambiando, haciendo a los dos ir soltándose hasta que finalmente volvieron actuar de forma natural sin siquiera ser conscientes de aquello.

Taehyung intentó levantarse en varias oportunidades, pero Hoseok no se lo permitió- obviando sus idas al baño-. No le había quedado más remedio que pasar otro día en cama, viendo televisión, jugando videojuegos y uno que otro juego de mesa, después. El castaño se quejó en varias oportunidades por no poder levantarse y salir de aquella habitación, pero en el fondo no le molestaba, disfrutaba de su tiempo en compañía del peli rojo.

El mayor había alegrado su día en gran medida, haciéndolo reír con sus comentarios, gestos y ruiditos espontáneos. Sin dudas Hoseok era la alegría en persona y daba todo de sí para hacer sentir bien a los demás. Por momentos, el castaño parecía olvidar todo eso que guardaba su mente gracias a su ayuda, pero inevitablemente volvían a él con el tiempo, era imposible que no lo hiciera con todo esos sentimientos inundando su interior.

En ese mismo momento volvían a Tae los recuerdos de lo ocurrido en el estacionamiento con el peli rojo. Taehyung se sentía mal al recordar la forma en que lo trató e intentaba buscar la forma de disculparse. Hoseok había notado lo retraído que se encontraba el castaño, pues a pesar de estar jugando su mirada se veía triste y perdida, eso lo preocupó.

- Tae ¿te sientes mal?- el menor prontamente volvió a centrar su mirada en él.

- No, Hobi. No me duele nada.

- ¿Estás seguro?- preguntó insistente.

- Lo estoy... lo siento, no quería preocuparte- le dijo apenado- ... es solo que... aún no me he disculpado apropiadamente por lo que pasó ese día antes de que me fuera... yo no quise tratarte de ese modo.

- Sé que no, no debes sentirte mal por eso- le dijo mientras dejaba sus cartas sobre la cama- Es entendible que malinterpretaras lo que te dije. Todo pasó muy rápido y puede que no me expresara de la mejor forma, pero te prometo que nunca sentí lastima de ti- le habló tomándole las manos.

- Lo sé, Hobi. En el momento me sentí abrumado y me dejé llevar por mis pensamientos negativos, pero ahora con mi mente más en calma puedo darme cuenta de que esto es real, que tus sentimientos hacia mí son sinceros y que no haces esto por compasión ni lástima.

- Por supuesto que no, Tae. Me importas y mucho. Sí es cierto que en un principio te hablé he intenté acercarme a ti por preocupación, pero fue eso, jamás lástima- el castaño no dijo nada, lo escuchaba con atención- ... te seré completamente sincero... desde el principio intenté ayudarte, eso es cierto.  Después de la primera llamada que te hice no hacía más que pensar en una forma de hacerlo. Desesperado intentaba llegar a ti, temía que hicieras o te pasara algo malo. Yoongi y Namjoon fueron los que me alentaron a hablarte después de nuestra primera discusión y así lo hice, comencé a escribirte he intenté a la fuerza llegar a ti, pero lo que se dio entre nosotros fue real. Todas mis conversaciones fueron sinceras, mis bromas y salidas también, porque lo que se generó entre nosotros fue completamente sincero... sí, lamento el ocultarte el que mis amigos sabían de ti y también lamento el haberles hablado de ti sin tu consentimiento, pero ellos eran mi apoyo... cuando discutíamos ellos eran quienes me daban fuerzas y ánimos... porque me importas mucho... tanto como no tienes idea. Ese día que te pedí no hablar más, me llegué a emborrachar y llorar por ti... eres especial para mí, Taehyung, no lo dudes. Solo buscaba una forma de poder ayudarte y lo hice... pero siento el haberlo hecho tan tarde.