You're my hope (HopeV)

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Hoseok sintió una opresión en su pecho al volver a casa, pues las luces de la entrada y la sala seguía encendidas del mismo modo en que lo estaban desde antes de su partida.

Un estremecimiento le recorrió el cuerpo. ¿Qué haría si Taehyung siguiera en el interior? No se sentía capaz de verlo otra vez en ese momento y menos en las condiciones en las que se encontraba.

Por esa razón, había entrado con sumo cuidado, muy consciente de todo a su alrededor -como si eso pudiera solucionar algo si Taehyung estuviera realmente ahí- pero para su suerte, no encontró rastros del castaño ni en el pasillo ni en la sala, o al menos rastros de su persona -si se era más específico- pues su ropa seguía regada por el piso, en los mismo lugares donde él las había tirado tiempo atrás. Eso lo descolocó un poco, pero al no sentir nada ni ver luces encendidas en el segundo piso lo intentó ignorar, dando un leve suspiro.

Sin embargo, toda aquella tranquilidad momentánea desapareció al segundo, al notar la luz encendida en la cocina. Ninguno se había acercado hasta allí antes, pero intentó no pensar demasiado en ello y dar por hecho que fue olvidada al igual que las otras dos al momento de la partida de Taehyung.

Pero ¿y si no era así?

Hoseok no quería pensarlo y eso se debía a un motivo en concreto, no sabría cómo darle cara de verlo otra vez. Por eso le costaba tanto, pues se sentía incapaz de volver a enfrentarlo. Le dolía demasiado el recordar lo sucedido antes como para revivirlo nuevamente. Además, ni siquiera sabía cómo lo encontraría de estar ahí o si sería lo bastante fuerte como para no querer consolarlo.

Muchos posible escenarios pasaron por su mente en ese breve lapsus en el que caminó hasta la cocina, pero lo que jamás esperó fue encontrarse con el cuerpo aun desnudo de Taehyung inconsciente en el piso con un charco de sangre descendiendo de sus muñecas y un cuchillo tirado a su lado.

Todos los pensamientos que tuvo hasta ese instante desaparecieron de golpe, del mismo modo que su enojo y pesar. Todo por lo que lloró y lo que sintió hasta segundos antes, perdió peso ante el nuevo sentimiento que lo recorrió en ese momento.

El miedo se apoderó de él, haciéndolo llorar casi espontáneamente en tanto corría con prisa hasta él.

- No, no, ¡Tae!...- dijo gritando entre llantos mientras caía a su lado, golpeando su cara para hacerlo reaccionar, pero el castaño no respondía- No... ¿Por qué me haces esto? ¡No, no!... Taehyung- llamó sin saber qué hacer en tanto se aferraba a su cuerpo frío.

Abrumado por la situación, solo se dejó llevar por su instinto. Había llamado con prisa a Namjoon, quien, para su suerte, le contestó a los segundos. Seguramente su amigo seguía molesto, pero Hoseok no pensó en nada de eso, llamarlo fue lo único que vino a su mente en ese instante. Por eso, al oírlo contestar no lo dejó decir nada, soltó todo de golpe.

- ¡Nam, no reacciona! ¡No reacciona! Hay m-mucha sangre- dijo entre lágrimas, desconsolado. Sin separarse ni un milímetro de su cuerpo. El mencionado asustado por la poca información y el estado de su amigo, olvidó todo su enojo, hablándole de inmediato.

- ¿Quién, Hoseok? ¿qué pasa?

- Tae, está inconsciente. Cortó sus brazos, pero no son cortes pequeños, hay mucha sangre, Namjoon. No reacciona, por más que lo intento no responde. No puede morir, Nam. ¡Por favor!...

- Respira, Hoseok, no es momento para que entres en una crisis.

- Es mi culpa, todo est-to es mi culpa- dijo acongojado.

- Ho, concéntrate, por favor. Revisa su pulso.

Asintiendo, Hoseok lo volvió a recostar en el suelo para llevar su oído a su pecho.