𝟑𝟎. 𝐁𝐈𝐋𝐈𝐓𝐀𝐌𝐏𝐀𝐒𝐇

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Capítulo 30

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Capítulo 30


27 de mayo.



A veces se me hace difícil creer que no estoy en un sueño.

Todo lo que he estado viviendo últimamente no parece más que una ilusión y que se acabará cuando despierte. Me cuesta creer que mi vida haya pasado de ser un maldito desastre a esto. A algo que parece una vida normal.

Soy libre, mental y físicamente.

Me siento mucho más querida que años atrás.

Tengo un trabajo que me gusta, y puede ser que ahora sea más madura.

Y Alastor... Bueno, todavía no sé cómo definir lo que siento hacia este chico. Hace apenas una semana empezamos a salir oficialmente, todavía se me hace tan raro.

En un principio éramos amigos, claro que había coqueteos e insinuaciones por su parte, aunque él es así con todos y me lo tomé como algo normal. A veces le seguía el juego, pero nunca lo vi como cosa seria. Hasta que esos coqueteos se hicieron más... ¿Reales? Todo había comenzado a cambiar y ni siquiera fui capaz de darme cuenta hasta que nos besamos por primera vez.

De ahí en adelante todo fue en picada. Un espiral de locura que me llevó a enredarme en sus encantos.

Y aquí estoy, saliendo con un chico increíble al que nunca pensé en gustarle de verdad. Supongo que el amarre o las galletas de amor funcionaron bien... Demasiado bien diría yo.

Salgo de la ducha y pongo mala cara cuando veo a mi mejor amiga lavándose los dientes, no le importa mi maldita intimidad.

— ¿Qué haces aquí?

— Lavarme los dientes – Responde con obviedad luego de escupir la pasta en el lavabo, ruedo los ojos con fastidio.

— ¿Y por qué cuando me estoy bañando?

— Como si no hubiera visto eso, Clarisse – Lava el cepillo y luego de dejarlo se voltea hacia mí, aferró más la toalla a mis pechos – y porque tengo que irme en un rato, tú estabas tardando mucho.

— ¡Entré hace diez minutos!

— ¡Exacto!

Terminó echándola del baño y le pongo seguro a la puerta, me seco el cuerpo y como tengo mi ropa aquí me visto con rapidez. Por suerte dejo de venirme justo hoy, lo que me hace feliz. Cuando estoy con el periodo soy una persona un poco más... Violenta de lo normal. No me gusta ni que me hablen, pero en fin. Tengo la gran suerte de que dure pocos días. Me pongo una blusa morada apenas escotada y unos jeans negros tiro alto que ajustan a mis piernas a la perfección, todo eso con mis botas militares. Cuando termino de cepillar mi cabello salgo y voy hacia la cocina encontrándome con que la cafetera está llena, así que aprovecho a servirme y sentarme junto a Ada que se encuentra comiendo espaguetis.

Ramé (TERMINADA)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora