𝐒 • 𝐁 • 𝐌 // ᴋ. ɴ. ᴊ.®

²⁸

ʙʏᴍ

7:04 p.m.
Bajé de mi auto y le entregué las llaves al chico de la entrada que se encarga de aparcarlo.

Entré al salón y me encontré con mi madre dando algunas órdenes.

— Esas sillas allá por favor — dijo mi madre a un empleado señalando hacía un rincón.

— Señora, el pastel llegó — informó una empleada.

— Que lo coloquen sobre la mesa del centro entre las estatuas de hielo por favor — contestó mi madre.

— Mamá — hablé una vez que la chica se fue.

— ¡Youngmi! ¡Que bueno que llegas! — exclamó, giró a mí y me observó de arriba hacia abajo — heredaste mi buen gusto... — susurró.

Llevaba un vestido gris con perlas en el corsé y llevaba el collar que Namjoon me regaló. No me lo he quitado desde entonces...

— Supongo — contesté revisando mi ropa.

La doctora Kim, madre de Jennie, entro al salón acompañada de su familia.

— Es hora Youngmi — dijo mi madre.

Juntas caminamos hasta la familia para recibirlos.
Los invitados fueron llegando y rápidamente el salón se llenó de personas bailando y charlando pero mis amigos no se veían por ningún lado.

— ¡Peque! — me llamo mi abuela.

Caminé hasta ella que estaba con un grupo de personas extranjeras.

— El es rector de la Universidad Complutense de Madrid — dijo en español — Joaquín, ella es mi nieta de la que te hablé.

Ya se a donde va esto...

— Mucho gusto — dije estirando la mano para saludarlo.

— El gusto es mío — contestó tomando mi mano — Tu abuela me ha hablado mucho de ti, estaríamos encantados de que formarás parte de nuestra institución...

Demonios... ¿Que hago?

— ¡Peque! — me llamó mi abuelo.

¡Gracias!

— Me disculpan — dije.

El hombre me hizo un ademán con la mano de "adelante" y caminé hacia mi abuelo.

— ¿Si? — pregunté a mi abuelo.

— Ven un segundo por favor — dijo.

Dimos tres pasos y nos unimos a otro grupo de personas extranjeras.

— Youngmi, el es rector de la Universidad de Oxford — dijo en inglés.

Oh no...

— Ella es mi nieta, te hablé de ella anteriormente — dijo dirijiendose al hombre.

El hombre estaba a punto de saludarme cuando mi papá nos interrumpieron.

— Disculpen la interrupción pero necesito a mi hija unos minutos.

Me tomó de los hombros y me arrastró a otro montón de personas, está vez conocía a varios, mi mamá también estaba ahí.

— Youngmi, querida — dijo una mujer de vestido rojo — ¿Me recuerdas? Soy rectora de la Seoul National University.

Hice una reverencia y sonreí intentando verme lo menos incómoda posible.
De lejos divisé a Jisung siendo arrastrado por su padre en dirección a nosotros.