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ʙʏᴍ

— ¡Feliz cumpleaños! — Gritó mi hermano a lo que me desperté de golpe.

— ¡Youngsoo! ¡¿Acaso me quieres matar?! — me quejé.

El rió y me despeinó con cariño.

— ¡Feliz cumpleaños a ti, feliz cumpleaños a ti, feliz cumpleaños querida Youngmi! ¡Feliz cumpleaños a ti!

Mis padres y abuelos entraron cantando a mi habitación. Mi abuelo traía un pastel en las manos.

— Pide un deseo cariño — dijo mi abuela.

Un deseo...

Cerré los ojos y sople las velas con una sonrisa en el rostro.

— Mi hermanita está creciendo, ya es adulta en todo el mundo — Dijo mi hermano con nostalgia.

Tras unos abrazos y palabras de aliento, mi familia salió de mi habitación para que me preparara para el colegio.

Tomé una ducha, me vestí, bajé, desayuné con mi familia y, tras escuchar el claxon del auto de Jisung, salí de casa despidiéndome y recibiendo mensajes de amor.

Jisung salió ayer a medio día del hospital, solo pasó una noche ahí sin contar la de la llegada, aún así faltó dos días a clase.

— Hola — saludé a Hyunjin y Jisung con una sonrisa.

— La peque creció — dijo Hyunjin intentando sonar como uno de mis abuelos.

Reí.

— Feliz cumpleaños — dijo Jisung.

— Gracias — contesté — ¿quieren?

Extendí el recipiente que mi abuela me dió a los chicos mientras Jisung arrancaba.

— La misma pregunta de todos los años y la respuesta es la misma — dijo Hyunjin tomándolo.

Saco un trozo de pastel y lo metió a su boca.

— ¡La gloria! — exclamó con la boca llena — Abre — le dijo a Jisung pasando una mano alrededor de su asiento hasta la boca de Jisung quien no dejo de conducir.

— El pastel de tu abuela es el mejor — dijo el con la boca llena.

Condujo hasta la escuela y aparcó entre Lía y a mi hermano. Bajamos del auto.

— ¡FELIZ CUMPLEAÑOS! — Gritaron Lia, Yuna y Jeongin corriendo hasta nosotros.

— Gracias — respondí.

Reí y saqué otro recipiente de pastel un poco más grande que el anterior de mi mochila y se los entregué.

— ¡Genial! — Dijo Lía — dile a tu abuela que la amo.

Los tres comenzaron a comer pastel.

Caminamos hasta el salón de clases entre saludos y felicitaciones por parte de alumnos y profesores.

Las clases continuaron hasta la campana de receso. Si antes era nombrada muchas veces por los profesores, este día era otro nivel.

— Estaremos en la cafetería por si nos necesitas — dijo Jeongin.

Se perdieron por el pasillo y yo seguí mi camino en busca de Namjoon, llegué al laboratorio y tras tocar la puerta, entré.

Namjoon estaba parado frente a su escritorio como cuando lee pero está vez tenía un pastelillo de la cafetería con una velita encima y un gorro de cumpleaños de color azul.

𝐒 • 𝐁 • 𝐌 // ᴋ. ɴ. ᴊ.®Donde viven las historias. Descúbrelo ahora