Jace, eres un idiota [Jace Norman y Tú]

16 | Jace, el gusano come cerebros

Okay, rebobinemos esto pa' ver si entiendo porque ando más perdida que turista en Nueva York.

Yo estaba muy tranquila hace unas horas planeando mi maquiavélico plan de broma/venganza para mis amigos. Como no poseo vida social más grande que la de mis compañeros de trabajo y parientes de los mismos, al primero que recurrí para la tarea ajeno al círculo laboral fue Xander. Además de que la paso bien con él y estoy segura de que tiene mente para bromas, claro.

Entonces, de repente hoy me picó la avispa del flechazo y comencé de la nada a sentirme atraída hacia él. Que a decir verdad no fue tan de repente, porque jamás he negado (al menos en mi interior) que me parece guapo, su personalidad me agrada y nos llevamos demasiado bien. Tal como con Jace. Pero no sé, definitivamente creo que me va a bajar la regla. Aparte, soy adolescente, ¿no? Se supone que haga cosas radicales y sin pensar gracias a las hormonas, entonces por eso me encuentro besando al hermano mayor de mi mejor amigo en la cocina de mi casa, luego de decirles a mis parientes sobreprotectoras que es gay para que no pensaran que estoy haciendo esto mismo.

Me encanta complicarme la vida, pana.

Y si sé que me estoy complicando la vida, ¿por qué lo sigo besando? Pues porque lo hace condenadamente bien, carajo. ¿La chica que lo rechazó habría llegado a besarlo? Porque si lo hizo de la misma manera que a mí, con sus manos en mi cintura apegándome hacia él con fuerza y sus labios acariciado suavemente los míos, vaya que sí estaba loca por decirle que no.

Les juro que me hubiese quedado ahí todo el día nada más por el mero gusto, pero algo se hizo presente en mis pensamientos tan fuerte que causó que lo separara de mí como si quemara más que el sol en Mercurio.

Y fue la cara y el nombre de Jace.

—Perdón —dijo Xander tras ver mi reacción—. Perdón, te juro que no quería, yo... bueno, si quería porque de no querer no lo hubiese hecho pero entiendo si tú no querías porque no me seguiste mucho el beso porque al principio sí y después no y son demasiadas cosas y ahora estoy hablando mucho, haciendo esto demasiado incómodo así que olvidémoslo, ¿te parece? ¿Sí? Okay.

Giró sobre sus talones y salió de la cocina. Yo me quedé como la rata que mi abuela envenenó con un pedazo de arepa: tiesa (no a la violencia animal). Tipo, ¿qué tengo que hacer? Me acaba de besar el hermano de mi mejor amigo, así de perrente, sin vaselina. ¡¿Qué es lo que sigue ahora?!

—¡Hey, chamo, espera! —Corrí hacia él y lo detuve sosteniendo su muñeca—. No podemos olvidar esto, o sea, literal fue muy random para mi gusto. Y mira que soy fan de la revista MAD así que amo lo random.

—Sí, bueno, quizás esto sobrepasó esos niveles —me observó removiéndose incómodo—. Yo... no lo sé, _____. Supongo que me provocó hacerlo.

—¿Te provocó? Por provocaciones el mundo se va a la mierda, Xander. No puedes besarme y decir "me provocó" —quería empezar a regañarlo pero mi consciencia me miraba alzando la ceja desde el interior de mi mente—. Aunque yo también te seguí el beso, así que no sé qué hacer. ¿Deberíamos armar un drama de todo esto? ¿Salir? ¿Volver a besarnos a ver si sólo fue la calentura de la cercanía?