Nunca pensó que podría ser descubierto, menos que fuera por el más bobo de sus amigos al encontrar una de las revistas. Aunque tal vez aquel chico, si que lo sorprenda.
- ¿Qué condición?
- De que no me alejes de tí.
-💜-
[🔥] Temática omegaverse
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Estaba aburrido.
Parado a una distancia de su hermana la cual estaba mirando entre las blusas que le llamaban más la atención y las ponía entre el montón de ropa que sostenía. Odiaba cuando su hermana quería ir de compras.
Al pensar en pasar tiempo familiar junto a su madre y hermana que no veía por mucho tiempo, los escenarios eran: salir a un restaurante, comer un helado, comer en casa o solo platicar mientras iban de camino a ver una película. En su mente no había estado el escenario de acompañarlas a comprar ropa.
Si por él fuera, tiraría todo y saldría corriendo para no seguir un segundo más ahí. Es que hasta sentía la mirada de omegas y betas sobre él, demasiado incómodo.
— ¿Ya te decidiste? Siento sus miradas atravesar mi alma —dijo en un susurro a su hermana.
La pelirroja rodó los ojos— Eres un alfa. Un alfa que está en una tienda de ropa para omegas y betas, claramente van a estar mirando —respondió desinteresada, mientras tomaba una de las blusas— Está es muy bonita.
— Nieves, por favor —suplicó, haciendo que la menor lo mirará.
Suspiró cansada— Vale, sígueme, voy a probarme toda la ropa que escogí y luego iremos con mamá —puso la blusa sobre la ropa que sostenía su hermano, para así empezar a caminar hacia donde dijo.
El alfa solo frunció el ceño mientras la seguía— ¿Probarte la ropa? Pero pensé que iríamos a pagarla de una vez.
— Debo probarmela para saber si me queda bien, deja de quejarte, te salvé de estar muchas más horas si ibas con mamá. Créeme, ella te hubiera hecho ver más cosas que te dejarían marcado de por vida —la beta tomó la blusa que puso— Ahora, siéntate a un lado mientras yo voy a probarme esto, saldré cuando tenga que probarme otra ropa.
Y solo suspiró rendido, mientras veía como la menor se iba con lo que escogió y él se sentaba en aquellos asientos amueblados, aún seguía aburrido y sabía que debía esperar más tiempo para poder irse.
Dejó la ropa a su lado, mientras trataba de pensar en otra cosa, como criticar la ropa que quería comprar su hermana. ¿Podría burlarse de ella? Claro, con eso se vengaría por tenerlo casi cuarenta minutos al querer saber que color de ropa le quedaría bien.
Su mirada fue hacia unas revistas apiladas una sobre otras, tomó una mientras ojeaba la portada y contraportada. Lo veía interesante, eran revistas, quizás podría encontrar aquellas etiquetas con el aroma a un perfume, de niño siempre las buscaba en revistas que compraba su madre. Entre ambos decidían que perfume podría comprar su progenitora.
