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~Creo que no debimos entrar

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~Creo que no debimos entrar.~

Dijo su lobo, estaba nervioso al igual que él y eso simplemente hacía que a su mente no viniera alguna palabra. ¡No sabía cómo decirle al chico frente a él que lo siguió como si fuera un acosador!

Es que seguramente y saldría corriendo de su casa.

Si la situación entre ambos las creía perdidas por como lo evadía, ahora no sabría si todo empeoraría y si, tal vez era demasiado negativo y no se acordaba que lo había sacado hace unas horas de un gilipollas.

Pero es Rubius, ¿qué esperaban?

— Bueno, yo... —no sabía a donde mirar, aquella mirada morada lo ponía demasiado nervioso— Es algo gracioso si te lo pones a analizar jajaja.... —sonrió nervioso.

El azabache sonrió curioso y a la vez divertido, ¿por qué estaba tan nervioso?— Rubén —el chico lo miró y solo alcanzó su mano, para tomarla entre la suya— No voy a enojarme por lo que me vayas a decir, ¿vale?.

Realmente creería si el omega era psíquico, otra razón no habría para que supiera lo que pensaba— Te seguí —notó la sorpresa para no soltó su mano— Estaba llendo a tu casa para hablar, quería preguntarte si es que estabas bien, tratar de saber lo que ocurría con nosotros... —se ruborizó al darse cuenta de cómo se entenderían sus palabras— Digo, ¡no lo digo de esa forma! Ya sabes... Hablo de nuestra amistad, quería saber el motivo por el que ya no me hablabas o salias con alguna excusa cuando me acercaba a tí.

~Te dije que era mala idea evitarlo, lo hicimos sentir mal.~

El de orbes amatista solo miraba esos ojos verdes, para mirar sus manos unidas y simplemente empezó reír. Una risa que desconcertó a su lobo, al del alfa y a Rubén.

— L-Lo siento solo que... —trataba de tranquilizar su risa, mientras respiraba— Joder chaval, es que mi lobo me lo advirtió, el que tenga que evitarte.

— Entonces... Si lo hacías —asintió despacio, el castaño se sintió un poquito mal por la confirmación.

— Pero no era por lo que tú hayas pensado Rub —miró sus manos de ambos, mordiendo su mejilla internamente y suspirando— No sabía cómo hablar contigo luego de saber que veías la revista de Karma's y que cierto modelo de lencería te interesaba —el alfa sintió su cara arder— creo que ya es fácil unir los puntos y saber porqué te evadía.

— ¿Qué?...

~¡Él es el modelo, bobo!.~

— Oh... —fue lo que dijo, mientras sus miradas se conectaban y ahí cayó en cuenta de lo que dijo su lobo, abriendo los ojos sorprendido y soltando la mano del azabache— Oh, mierda.

El omega solo miraba la sorpresa en el rostro de su amigo, no debía ser un genio para saber que su lobo fue quien le dió la respuesta. Suspiró, pensó en tantas posibilidades y diferentes escenarios cuando tendría que ser sincero a aquel chico. Nunca había pensado que ocurriría estando ambos solos, en casa del alfa y con su ropa puesta.

ミLustful secretミ RubegettaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora