Escuchaba murmullos, no entendía bien que decían aunque si reconocí las voces Alos, Andros, Ender y Giovanni, al parecer discutían sobre algo pero no sabía sobre qué.
Traté de prestar un poco más de atención
—¡Si no lo hacemos va a morir!—Alos sonaba molestó.
—Estas loco, no puedes llevarla hay, tal vez sea un resfriado.
Escuché un golpe secó sabía que era Alos—Maldita sea Andros no entiendes no es ningún resfriado ella es mitad demonio, o es que aún no lo entiendes
—No la vas a poner en peligro—otro golpe cómo pude me puse de pie, pero me sentía demasiado débil, mareada, agotada, como sí estuviese enfermar.
Traté de agarrarme de la mesita de noche para no caerme pero fue en vano caí al suelo juntó a la pequeña mesa de madera la puerta se abrió y Ender fue el primero en pasar me ayudó a ponerme de pie y me miró con cara de preocupación.
—¿Qué sucede Ender?—Apenas pude hablar porque sentía la garganta seca
—Alos tiene razón Miroslava no está bien, su cuerpo se está debilitando.
Andros golpea la pared con frustración pero yo seguía sin entender
—Será que me podrían explicar que coño pasa—Ender me ayudó a sentarme en la cama
Alos se recostó al marco de la puerta y Andros entro y se sentó a mi lado puso su mano en mi frente —Tiene que haber otra solución.
—Miroslava, cómo eres mitad demonio es normal que necesites del fuego del infierno, por lo menos yo necesito visitar el infierno dos veces por semana a diferencia de Ender que solo va una vez al mes, el fuego del infierno te devuelve la energía que hayas perdido.
Miro a Alos y luego a Andros seguía sin entender muy bien la situación solo sentía que cada minuto que pasaba me debilitaba más y más.
—Me quiero acostar—Andros me ayudó y me arropó pero eso no servía de nada seguía sintiéndome helada.
Luego de un rato de silencio y de miradas asesinas entre Alos y Andros, Giovanni hablo—Alos, tu dominas el fuego del infierno y si produces un poco de ese fuego como si fuera una fogata.
Alos alza una ceja—Es que ahora los vampiros también son super inteligentes—sonríe mofandose—
Ender lo mirá—Giovanni tiene razón Alos, podemos intentarlo, además Miroslava también controla el fuego aunque aún no sabe
Alos camina hacía mí mientras se frota sus manos se sienta a mí lado y al separarlas una pequeña llama sale de ellas, su color es de un tono rojizo-anaranjado, lo miró
—¡¿ Me Quieres calcinar?!Me mirá fijamente a los ojos y luego responde—Confía en mí vamos coloca tus manos.
Paseó mi mirada por los otros tres qué están en la habitación —Esto es una locura
—Vamos bebé confía en mí—Repite Alos mientras acerca un poco más el fuego.
—Una vez confíe en tí y me quemé—mi voz se quebró agaché la mirada y Andros toco mi hombro volteó a mirarlo —Hazlo Miroslava no te pasará nada—Sonríe—
Afirmó con un movimiento de cabeza y colocó mis manos sobre la pequeña flama, poco a poco siento como mí cuerpo empieza a calentarse.
—Vez ya no está tan pálida—dice Giovanni que está recostado al marco de la puerta.
Alos no dice nada, ni siquiera se digna a verme sólo ve el pequeño fuego, escúchamos las escaleras de madera, Alos se apartó e hizo que el fuego desapareciera.
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Entre Ángeles Y Demonios
FantasyEl nacimiento de Miroslava esconde muchos misterios, misterios que serán revelados obligándola a tomar una decisión que cambiará su vida, Alós Stuart es un semidemonio él sabe que el alma de Miroslava lo puede convertir en un demonio así que decide...