STAY [FELIX]

XVII. Unión

-T/n: si…
-Felix: estás nerviosa? - Preguntó en un tono burlón.
-T/n: yo? Qué tontería, claro que no. - Negué de la mejor forma que pude.
-Felix: pues eso no es lo que parece. -Dijo acercándose cada vez más hacia mí hasta quedar su cara frente a la mía a tan solo unos centímetros.

En ese momento me quedé paralizada, nunca había estado tan cerca de él, y eso generaba en mí sentimientos, surgidos en ocasiones anteriores, pero de una manera más intensa. Nuestras miradas estaban fijas en el otro, y en completo silencio nos quedamos durante unos segundos, que se hicieron eternos, sin mover ni un solo músculo.

-Felix: bueno, deberíamos de ir empezando. - Rompió el silencio de repente a la vez que se alejaba de mí.
-T/n: ya voy. - Dije, todavía quieta en el lugar en el que me encontraba, a la par que recuperaba el aliento y volvía a mi ser.

Al llegar a la cocina vi una alargada mesa, con todos los ingredientes y utensilios necesarios encima.

-Felix: preparé todo lo que vamos a usar antes de bajar a por ti para ponernos directamente con la receta.
-T/n: perfecto, tú eres el que manda.
-Felix: espera un momento. -Dijo yéndose directamente hacia una habitación, para que apenas unos instantes después apareciese de nuevo. - Toma, puedes ponerte mi camiseta, para que no te manches la tuya.
-T/n: que boba… con lo que me mancho yo cocinando no sé cómo no he podido tenerlo en cuenta. Gracias.
-Felix: puedes ir al baño a cambiarte, es esa puerta de ahí. - Indicó, por lo que me dirigí hacia allí.
-T/n: esto me queda un poco bastante grande. - Dije al salir con la camiseta ya puesta. Felix tan solo me miró de arriba a abajo para seguidamente ponerse a reír.
-Felix: parece que llevas un vestido. - Comentó a carcajadas, a lo que yo respondí con una cara enfadada.- No me mires así, eso solo te hace ver aún más adorable.
-T/n: está bien, me rindo. ¿En qué te ayudo? - Pregunté cambiando de tema.
-Felix: ten, puedes derretir la mantequilla mientras yo mezclo esto de aquí.

Llevábamos ya un rato desde que empezamos cuando la masa estaba casi lista.

-Felix: ahora tienes que añadir la harina en lo que yo lo bato. El paquete es nuevo así que tienes que abrirlo.
-T/n: esto está duro. - Protesté forcejeando con el envoltorio.
-Felix: quieres que te ayude?
-T/n: sí, porque yo no soy capaz.
-Felix: nada, yo tampoco puedo. -Dijo tras haberlo intentado. - Voy a por unas tijeras. - Y mientras él las buscaba, yo seguía intentando abrirlo, hasta que de repente… ¡¡POOM!!.. Se abrió de golpe, lo que provocó que saliera una gran nube de harina, manchando todo el alrededor.
-T/n: no hacen falta las tijeras, ya lo he abierto. - Dije con la cara y la ropa llena de harina.
-Felix: pero que ha pasado aquí? -Preguntó al ver el panorama.
-T/n: ya lo ves, lo siento, ahora mismo lo limpio todo.
-T/n: mira que eres cabezona. - Dijo riéndose. - ¿No podías haberte esperado a que las trajese?
-T/n: ya te he dicho que perdón… no pensaba que fuera a salir todo disparado.
-Felix: tranquila, no me importa que hayas ensuciado todo esto. Pero es una pena que te hayas manchado tú. - Afirmó a la vez que reposaba sus manos sobre mis mejillas, limpiandolas así.
-T/n: no pasa nada, puedes limpiarme.
-Felix: limpiarte? ¿Yo? Si eso deseas no puedo decir que no.
-T/n: puedo limpiarme…si… eso quería decir… que puedo limpiarme yo. - Corregí nerviosa al ver que mi subconsciente me había fallado, y había dicho en alto aquello en lo que pensaba.
-Felix: pues venga, ve a limpiarte, ya sabes donde está el baño.
-T/n: si, voy. - Respondí, pero al ver que no tenía intención de moverse decidí sacudir mi camiseta, lo que hizo que la harina saliera desprendida hacia el.
-Felix: ay - Sé quejó mientras tosía. - Eres mala, ahora yo también estoy manchado.
-T/n: pero si no tienes apenas nada. - Reí.
-Felix: te hace gracia?
-T/n: mmm pues sí. -Y sin aviso previo se acercó a mí y me abrazó.
-T/n: a qué viene esto?
-Felix: me los debes, y yo decido cuándo usarlos.
-T/n: creo que ya has utilizado bastantes.
-Felix: nunca son suficientes. - Dijo apartándose de mí. - Bueno y ahora sigamos con las galletas o nunca acabaremos. - Terminamos de hacer la masa y de darles forma para luego meterlas en el horno. - En unos quince minutos más o menos ya estarán.