Todo es cuestión de tiempo - Primera Parte

Capitulo 22 (Segunda parte)

Pasaron unos minutos, desde que llegue a la sala de espera, para que me indicaran que me acercara a la plataforma de salida al ring. Todo el enfado que me cubría, no se había ido. Él lo haría hoy. Estaba segura, pero ¿Por qué? ¿Por qué llegar a tal punto? No. ¡Es inadmisible y punto! ¡Maldición!

-Ahora finalmente, ¡¡Llegamos al último enfrentamiento de la división femenina!!- anunció la presentadora del evento.

Respiré hondo para calmarme y centrarme, pero no podía. Mi cólera era más fuerte. La plataforma donde me encontraba parada se comenzó a mover hacia la arena. Mi sangre hervía por la imagen clara en mi mente en esos momentos. ¡Maldición! ¡¿Por qué justo ahora?!

-¡¿Hay algún buen hombre por ahí~?! Acaso, ¡¿Hay algún hombre por ahí?! ¡¡Ella sigue sosteniendo el título de la mujer exorcista más fuerte!!- comenzó a anunciar la animadora- ¡¡Cabeza de la casa Mitejima, la comandante celestial "Tenkou"!! ¡¡Mitejima, Subaru~!!-

Miré la plataforma de mi oponente y su sonrisa gentil. No me tomaba en serio. Eso lo sabía, pero no podía importarme menos en estos momentos. Levanté un poco mi rostro y la dirigí hacia donde estaban los comandantes celestiales. El rostro de Tenma Unomiya era lo único que podía ver. Comencé a rechinar mis dientes mientras apretaba mis manos en puños.

-¡De Otomi a Amawaka! ¡De un blanco kariginu a uno negro! ¡¡Ella cambio su aura sanadora a un espíritu de lucha, y carga el honor de su padre en sus garras!!-

Cerré los ojos y solté un leve suspiro entre dientes. Intenta calmarte. Vamos, respira. Respira.

-La nueva cabeza de la casa Amawaka, la comandante celestial "Byakko" (Provisional), ¡¡Amawaka Mayura!!-

Abrí los ojos para mirar la poca distancia que quedaba para estar en la arena. Sacaré ventaja de este enfado para demostrar a la nueva Mayura. Miré hacia mi oponente y fruncí mi ceño más de lo que ya lo tenía. Sabía algo, Mitejima Subaru, no me veía como un rival ni nada parecido. Claro, era la citadina que recién llegaba a la isla y que había empezado su entrenamiento hace dos años, ¿Qué de bueno puede traer eso? Rechiné los dientes. Mi mal humor solo empeoraba.

-¡¡Una voluptuosa belleza vs una saludable belleza!! El último combate de la mañana para la sección femenina será entre: La emperatriz quien siempre ha estado en la línea frontal, ¡Mitejima Subaru- sama! –

Todo el público soltó una aclamación mientras aplaudían y se emocionaban en sus lugares, en especial la casa Mitejima. Cerré los ojos por un minuto para centrarme en el ahora.

-... Y enfrentándose a ella... está un caballo negro sin precedentes, quien ha sido elegido como un comandante celestial después de un corto periodo de dos años de experiencia como exorcista, ¡¡Amawaka Mayura!!-

Los gritos de mi casa no se hicieron esperar. Miré a un lado hacia el lugar donde estaban mis camaradas de la familia Amawaka. Sus sonrisas y sus palabras aliviaban un poco el enojo que sentía, pero, al mirar a Yuzuru-san, pude ver su mirada escudriñadora hacia mí. Ella sabía que algo no andaba bien. Asentí levemente a su dirección y la vi cerrar los ojos. Sabía que había entendido ese gesto. Una cuestión había hecho su aparición. Una cuestión que me mostraba el rostro bañado en dolor de una de las personas más importantes para mí. Volví mi mirada al frente para ver la ceja levantada de Mitejima-san.

-¡Verdaderamente, este es un enfrentamiento entre la reina del top actual vs la princesa que carga en sus hombros la siguiente generación!-

A mi mente vinieron los recuerdos de la explicación que me había dado Yuzuru-san de mi contrincante. Sin duda alguna tenía un historial impecable. La cruda verdad fue dicha por mi mano derecha esa vez: "Incluso en términos de experiencia de batalla, hay una enorme diferencia entre las dos. Honestamente,... dudo que haya alguna persona que piense que ganarás, Mayura-sama". Fruncí los labios ante ese hecho, pero... Una imagen vino a mi cabeza. Un minuto en el futuro. Abrí los ojos...