Hablándole a la luna de ti.
Y ahora estoy aquí sentada,
frente a la ventana de mi hogar.
Recordándole a la luna
los recuerdos que tengo sobre usted. Sobre aquella sonrisa y la forma
en la que leías las obras
más clásicas de
todos estos tiempos.
De tu forma de escribir
en tu libreta.
De tu habla cuando
me pedías lo que querías
beber en el día de hoy.
Le digo a luna el miedo
que tengo de que no vuelvas,
de que no aparezcas.
Le digo que soy
una imbécil por
no haberme acercado
a usted desde antes.
Soy una cobarde.
Fue la única oportunidad
de hablarte y la desperdicie.
Ahora no estas, y te extraño.
Me siento como un niño cuando desperdicia un regalo y llora cuando se lo sacan.
Eva.
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Hablándole a la luna de ti ©
Teen Fiction«Cuando la luna este acompañandote por tu jardín, imagina que también estaré yo, a tu lado. Cuidare tu caminar y te deseare las buenas noches, mi querida...» Una historia radicada en 1940 en la excéntrica ciudad de Buenos Aires. El otoño sabía agrid...
