Hablándole a la luna de ti.
Vísperas de la gran fiesta de máscaras
donde los barrios familiares se acercarán
para conocerse mutuamente.
Mis ojos brillaban de ilusión y mis dedos
no paraban de diseñar la dichosa máscara.
Aunque esperaba con toda la ímpetu que usted
estuviera allí, con tus ojos océanos y tus rizos
floreciendo detrás del antifaz.
Imaginarte en un increíble vestido, coloreado
de sutiles rojos y dorados. Mis mejillas se sonrojan
al soñarte tan bella con esa delicadeza que tanto
te caracteriza.
Después de tanto tiempo te voy a poder ver.
¡Cuanto entusiasmo!
Prometí no ilusionarme, pero ya es demasiado tarde.
La tinta de mi pluma pide por favor un descanso, ya nada sale de esta. Me veré en la obligación de comprar más tinta.
Pero usted y yo, mi perfecta contradicción; Nos volveremos a ver.
Eva.
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Hablándole a la luna de ti ©
Teen Fiction«Cuando la luna este acompañandote por tu jardín, imagina que también estaré yo, a tu lado. Cuidare tu caminar y te deseare las buenas noches, mi querida...» Una historia radicada en 1940 en la excéntrica ciudad de Buenos Aires. El otoño sabía agrid...
