INSOPORTABLE - KOOKMIN

12

JiMin se sentó detrás de su escritorio mientras miraba a su cliente, Whein. La mujer era todo curvas y feminidad. Por no hablar de que era una profesora de química en la universidad de Chicago. Era hermosa, inteligente, y más dulce que la miel.

En serio, ¿cómo es que Whein seguía soltera?.

JiMin puso sus papeles sobre su escritorio y trató de no pensar en JungKook.

—¿Cómo te sientes acerca de ir a una cita con un chico que es un poco diferente? —preguntó JiMin, pensando en Mino.

No estaba haciendo esto porque JungKook dijera algo. No lo estaba.

—Él es muy dulce y tiene un trabajo estable —continuó JiMin.

—¿De cuán diferente estamos hablando aquí? —preguntó Whein. —¿Estamos hablando de diferente tipo "me tomo una cerveza en la mañana" o de diferente tipo "me creo perro y me gusta perseguir autos"?.

—No trabajo con cualquier persona diferente que persiga autos —dijo JiMin. Bueno, excepto por JungKook, pero no estaba técnicamente trabajando con él.

JungKook lo estaba acechando.

—El tipo del que te estoy hablando es más como diferente tipo "me tomo una cerveza en la mañana" —respondió JiMin.

—Bueno, he intentado todo los demás —Whein gimió en derrota. —En serio, ¿qué hay de malo en mí? Todas mis amigas están casadas y con niños.

¿Piensa que algo está mal con ella?.

Si supiera mis problemas... Con el ceño fruncido, JiMin se acercó y agarró las manos de Whein

—Escúchame —le dijo JiMin. —No hay nada, y lo digo en serio, nada mal contigo. Eres una de las mujeres más hermosas e inteligentes con la que jamás he trabajado. Tu "Sr. Indicado" está ahí fuera. Eres tan espectacular que tu pareja perfecta no es alguien promedio u ordinario. Es espectacular, igual que tú. Cuando finalmente te reúnas con él, pensarás que valió la pena la espera.

—¿Eso crees? —Whein lo miró un poco avergonzada.

—Lo hago —JiMin asintió.

—Mírame, lloriqueando como una niña —Whein se echó a reír. —Es sólo que quiero tener un bebé y todavía estoy soltera.

—Me tienes ahora —JiMin sonrió. —Voy a encontrar a tu alma gemela. Para estas fechas, el año que viene vas a enviarme una invitación de boda.

—Espero que sí —Whein sonrió. —Me alegro de inscribirme para tus servicios. Deberías cobrar más, porque eres como un psiquiatra, así como un casamentero.

—Se trata de una parte de mi trabajo —JiMin le sonrió.

—Bueno, gracias por todo —Whein se puso de pie y le sonrió.

Cuando la mujer se dirigió a la puerta, JiMin agarró su maletín y siguió detrás de ella. Tenía la intención de tomar sus cosas e irse ahora que su reunión había terminado. Cuando JiMin y Whein se dirigieron fuera, alguien estaba junto a la pared.

JiMin miró directamente a un par de ojos negros brillantes y fue cegado. Era JungKook. Él debe haber sido visible en este momento porque Whein se quedó helada.

—Hola —JungKook le sonrió a la mujer, mostrando su sonrisa más seductora. —Espero que tu sesión con JiMin saliera bien.

—Yo, ugh... —Whein abrió y cerró la boca varias veces, probablemente conmocionada por la hermosura de JungKook. —Sí, todo salió bien. No eres uno de sus clientes también, ¿verdad?

Oh chico... JiMin sabía lo que Whein quería decir. La mujer quería una cita con JungKook.

—No es uno de mis clientes —dijo JiMin.

—Estoy aquí para llevar a JiMin a comer algo rápido —dijo JungKook.

—Oh —la sonrisa de Whein titubeó por un momento, pero luego volvió a crecer. —Pido disculpas. Ni siquiera sabía que JiMin estaba saliendo con alguien.

Vaya. ¿Whein pensó queestaba saliendo con el ángel desquiciado? ¡De ninguna maldita manera!

Incluso JungKook parecía estar sorprendido por la insinuación porque su boca seabrió con horror. Eso lo hizo enojar.

¿Qué derecho tenía JungKook para lucir infeliz? Comparado con JungKook, ¡él eratodo un partido!

Le miro enojado.