3 de diciembre
9:00
Cuando desperté me sentía muy agotada, las piernas me temblaban y estaba muy tensa, no se a que hora se fue Sanzu, ni siquiera recuerdo quedarme dormida.
Un teléfono comenzó a sonar, no era el mío, de hecho no se que fue del mío, pero conteste.
Llamada entrante de número desconocido
¿Hola?-
-¿Como estas mi churrumais?
¿Que? ¿Con quien hablo?-
-Tu futuro esposo y heredero de tu dinero, Kokonoi Hajime
Ahh eres tu, desgraciado, devuélveme mi dinero-
-Nuestro dinero, cariño, pero bueno cambiando el tema, ¿Qué tu no piensas tragar o que?
Estaba esperando a que mi futuro esposo me trajera el almuerzo a la cama-
-Andas muy graciosa hoy, baja ya por que si no lo haces, almorzaras sola, 3er piso sala 2, apúrate.
Koko termino la llamada, me levante como pude y abrí el closet que tenia frente a mi, había mucha ropa, todas eran nuevas tenían sus etiquetas, pero jale una playera larga y con eso salí, estoy secuestrada ¿Qué secuestradores le dejan un closet lleno de ropa de marca a la secuestrada?
Mientras bajaba escaleras miraba desde las grandes ventanas la ciudad, todo en este edificio era muy lujoso. Al llegar al lugar que me dijo Koko lo vi contando dinero en la mesa mientras una mujer preparaba jugo de naranja.
-Hasta que te dignas, ¿te sacaste bien las pulgas ayer?
-Si, de hecho te deje unas en tu cuarto.- conteste
Hizo un sonido de burla con su boca y siguió contando, justo cuando iba a tomar asiento frente a el en la larga mesa de cristal una voz conocida me hizo voltear.
-Perdona si te hice esperar en el Jacuzzi, linda.- era Ran, vestía un traje formal gris con lila mientras se acomodaba la corbata.- Tuve unos contratiempos y no pude llegar a tiempo, pero te deje un regalo con Koko, ¿lo recibiste?
Voltee a ver a Koko el cual no me levantaba la mirada, fingía no escuchar mientras contaba su dinero.
-Koko, ¿le diste el obsequio?- pregunto Ran con voz molesta al percatarse de la situación.
-Ahh no, apenas iba a hacerlo, como se lo iba a dar si no se levantaba.- dijo y salió de la sala.- ya vuelvo con el.
Ran se acerco a mi y tomo mi mano, la beso y dijo.- ¿Dormiste bien?
-Si.- asentí
Tomo con su mano mi mentón y se acerco más, creo que quería besarme, no lo se, solo me quede inmovil.
Pero antes de que lo hiciera entro Koko con un una maniquí con ruedas y un vestido Lila precioso en el. Tenia pequeñas piedras alrededor del pecho y resaltaba el corset de la cintura, era largo hasta el tobillo y no tenia mangas, era lindísimo, cualquier mujer que lo usara resaltaría de una forma preciosa.
Ran me tomo del brazo y me acerco al maniquí.- ¿Te gusta?.- me pregunto.
-Si.- dije, no sabia que decir, un vestido así debía costar una fortuna.
-No iba a estar a la venta pero conseguí que el diseñador Takashi Mitsuya me lo vendiera por 3 millones.
-¿Que?- dijimos Koko y yo al mismo tiempo.
-Así es, no podría decir que estoy enamorado de ti por que acabe de conocerte ayer pero tienes algo que llama mucho mi atención, considéralo como un obsequio de bienvenida a mi vida.
Koko tenia la boca abierta, solo miraba el vestido y a mi, creo que su mente no procesaba el costo de esa prenda, no sabia que decir solo sonreí y dije.- Gracias.
El me sonrió y se acerco a mi.-debo irme, solo vine a verificar que Koko te lo entregara.-me dio un beso en la frente y salió de la sala.
-Llevas un pinche día aquí y Ran te regala un vestido de 3 millones, ¿pues que te crees?.- dijo Koko.- Bueno de todas formas como tu futuro esposo puedo vender ese vestido y administrar el dinero para sacar más ingresos.
-Nooooo, Kokonoi, aléjate del vestido.- amenace y me puse enfrente en el.
-¿Sabes cuantas pagarían por tener una trusa hecha por Takashi Mitsuya?
-Pues claro si no soy tonta, quiero conservarlo así que aléjate de el.
Una mujer entro con tres vasos de jugo y platillos con alimentos variados y los dejo en la mesa.
Detrás de ella entro otro tipo con una cicatriz en el ojo.
-A ti te estaba esperando.- le dijo koko
-¿Que quieres?.- contesto de mala gana.- ¿y tu quien eres? espera, ¿eres la del atentado de ayer?
-¿que?
-No me cambies el tema, Kakucho, te di las armas que necesitabas y ¿gastaste más dinero para decorarlas?.- lo regaño koko.- tu si estas mal de la cabeza ¿Qué son esas mamadas de pudin con brillitos?
Trate de no reírme pero en realidad estaba más intrigada de que me conociera de algún lado, y más si fue de la balacera.
-Cállate koko.- Kakucho tomo asiento y me dijo.- Sanzu y yo fuimos los responsables del atentado de ayer, si te vi, casi te cagas del miedo.
-¿Por que?, ustedes mataron a mi tía.- dije, este tipo suelta las cosas así nada más por que si.
-Tu tía sabia cosas que no debía, así como tu ahora mismo.- me quede helada en ese momento ¿va a matarme?
-No voy a matarte, no me lo han ordenado, pero es posible que no vuelvas a salir de este lugar.- dijo llevándose el vaso con jugo a la boca
-¿Quien te ordeno matar a mi tía?- pregunte.
-Fui yo.
Mikey apareció en la puerta con Sanzu al lado.
