Un matrimonio sin amor - CARMUEL

Capitulo 17

SAMUEL P.O.V

En dos días es el cumpleaños de Carla y ella decidió celebrarlo en el club junto a todos nuestros amigos, por supuesto yo también estoy invitado, por eso le compre el regalo que será mil veces mejor que el de imbécil de Christian.

Note un gran cambio en Carla, no sé porque pero me da sensación que quiere terminar con esto de que nos convertimos en amigos y además nos acostamos juntos a veces.

-¿Estas contenta por tu fiesta de cumpleaños? – pregunte al verla en la cocina

-Mucho – responde sarcástica

Me acerque a ella, tengo que averiguar si realmente su cambio es debido a nosotros dos.

-Si quieres podemos quedar en casa y montar una fiesta acá – susurre al tocar sus manos

Ella me mira con mucha preocupación en los ojos, no se a donde nos lleva esto.

-No creo – dijo

-¿Por qué? ¿Acaso no tenemos algunas cosas en común?

-Si, tenemos, pero no me apetece estar contigo todos los días – explica

Se va hacia el salón, yo le seguí porque quise resolverlo todo de manera rápida.

-¿Por qué? – dije al tomarle por el brazo

-Porque no quiero, no llevamos una relación como para estar junto a ti siempre y cuando tú lo necesitas. Igual deberías buscarte a otra mujer, una mujer que esta fascinada por ti y tu manera de ser.

Joder.

-No me jodas, Carla... de nuevo piensas seguir con esta estupidez de que tu y yo no seamos amigos, que me odias, que yo no te soporto – dije molesto

-¿No es cierto?

-¡No, no lo es!

No sé porque sigue negando que realmente somos hechos uno para el otro, yo tampoco pensé que iba importarme alguien más que yo mismo y mis placeres, pero ahora el único placer que llego sentir es junto a ella... y no se trata de ser solamente amigos íntimos.

-Necesito estar contigo – susurre con miedo

Ella me mira con más miedo y preocupación, creo que tiene miedo de salir herida o hacerme daño.

¿Sera posible eso?

¿Sera posible terminar sufriendo por una mujer?

CARLA P.O.V

Cada vez que quiero huir y terminar con este acercamiento absurdo que ocurrió con Samuel, simplemente no puedo porque él no se atreve dejarlo todo y seguir adelante.

-Lo que tú necesitas es encontrar otra mujer y seguir siendo el mismo de antes, lo que te mueve es ser irresistible y conseguir lo que quieres.

-¿Y qué es lo que yo quiero? – cuestiona con una sonrisa

Ah... el imbécil sabe bien lo que hace, acercándose a mí, tentándome, haciendo todo lo posible para que no pueda resistirse a sus encantos.

-Si quieres terminar con esto... - decía al acariciar mi mejilla - ... por mi está bien.

¿Enserio?

-Pero, antes de eso quiero estar contigo una vez más, ¿entiendes?

-¿Por qué?

Me besa en labios suavemente, queda mirándome en los ojos y por fin responde mi pregunta.

-Imagina que soy un drogadicto que necesita probarlo una vez más antes de que decida irse a rehabilitación, fíjate que para mi tu eres como droga, igual terminas matándome - susurra derrotado

No sé cómo deje que las cosas llegan hacia este punto, ojala pudiera volver atrás.

-Y yo estoy sintiendo en profundidad de mi corazón que tú tienes miedo, miedo de engancharte, de sentir lo que estas sintiendo. ¿O me equivoco? – dice con voz ronca

Idiota, no tiene idea de nada...

Pero algo me hico besarle, quitarle esa ropa, llevarle a habitación para volver a estar con él una vez más antes de volver a realidad.

Algo estaba diferente, estábamos en su habitación y acostados en la cama después de estar juntos de nuevo. Algo no funciona, simplemente no es lo mismo que todas las veces anteriores.

Samuel toma mis manos, acariciándoles y dándome besos que me hacen sentir un gran escalofrió.

-¿Estás segura que deberíamos terminar con esto? – cuestiona serio

Le miro fijamente en los ojos, estaba manipulando toda la situación, me dijo que deberíamos estar juntos una vez más antes de dejarlo y ahora va con esto. ¿Cómo se atreve?

Me aleje un poco de él tomando toda la sabana para cubrirme, me sentí demasiado desnuda metafóricamente mientras Samuel apoya una mano sobre la cama y sigue mirándome.

¿Cuándo piensa dejar de mirarme?

-De seguro te estás preguntando cuando dejare de mirarte, ¿verdad?

Me da miedo sentir lo que estoy sintiendo, me da tanto miedo que prefiero dar vuelta y irme que enfrentarlo.

-No estaba pensando en eso – dije

El sigue mirándome, quiere entender lo que me pasa por la cabeza, pero el ya lo sabe.

Se acerca a mí de nuevo, apoya mano sobre mi mejilla, me acaricia y de nuevo aparece una gran barrera entre los dos.

Estoy segura que con otras mujeres no se comporta de esta manera, si fuera así ya estuviera en una relación feliz y no sería tan odioso con complexa personalidad que jamás entenderé.

-Creo que te quiero – susurra

Me mira en los ojos sin moverse, yo no puedo creer lo que acaba de oír, no quería creer en esa posibilidad y ahora está pasando de verdad.

Se aparta de nuevo, yo quedo mirando el techo y pensando en problemas que podría traerme lo que acaba de susurrarme, no hay nada peor que un hombre como Samuel que te diga que te quiere.

Una parte de mi deseaba que se trata de confusión o que igual no sabe lo que dice, estoy segura que dentro de pocos días volverá a normalidad – esa normalidad de liarse con diferentes mujeres y ser un desgraciado conmigo.

Me sigue con su mirada, pero yo tome las sabanas y me levante, caminando hacia el baño sabiendo que él sigue mirándome, quería vestirme y terminar con este de una buena vez. No me atreví volver mirarle, simplemente no pude...