12. Mentir

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12. Mentir

Era la enésima vez que Defteros huía del Sexto Templo después de ser víctima de las verdades sin filtro de Asmita. Había perdido la cuenta de las veces que se había enojado con aquél que se empeñaba en considerar amigo, siendo el mismo que le desnudaba sus propias mentiras sin pedir permiso ni perdón.

Pero esa tarde, el joven de bellas facciones y misteriosa presencia, le había vuelto a ofender. Defteros ya no sabía si lo hacía adrede o si era porque el corazón de Asmita estaba tan vacío como aseguraban todos sus recelosos camaradas.

Le había reiterado que el bozal que se empeñaba en lucir, era una decisión sumisa. Le había soltado que su gran poder estaba completamente asalvajado, y que apenas sabía usarlo. Le había tachado de inconsciente o estúpido...O de ambas a la vez...

"O te entrenas sin esconderte, mostrándote al Santuario y afrentando a tu hermano, o aprendes a dominar un cosmos que parece desees que delate tu maldita existencia"

Solamente le había faltado tildarle de cobarde. Y ahí Defteros se enfureció como hacía tiempo no le sucedía.

Se prometió no volver a pisar esas solitarias baldosas. Olvidarse de la protección de esas termas que le habían hecho sentir un poco más humano durante todo el verano. Y dejar de pensar que en Asmita podía encontrar al amigo, compañero o lo que fuera que se había convertido ese muchacho para él.

Virgo no sabía mentir, ni siquiera piadosamente. Y al gemelo eso le dolía. Y le hería. Quizás porque se hallaba juzgado sin saberlo...O tal vez porque en el fondo de su alma sabía que todo lo que Asmita le decía sin miedo era la pura verdad.

La única que había, por funesta que fuera.

Fue ahí, con su alma arañada a discreción cuando se dio cuenta que las verdades punzaban hondo, pero que las mentiras vestidas de promesas lastimaban todavía más.

30 drabbles y viñetas para DefterosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora