Cap 3. Bonjour.

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Buenass, buenass <3

Espero que disfrutes el capítulo.

Perdón por tardar tanto en actualizar, estoy de exámenes :/

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Las suaves y pálidas manos de Víktor se deslizaban con delicadeza por su pecho.
Sentía el frío de estas penetrar en su piel, pero era extrañamente agradable. El peligris detuvo las caricias cuando llegó a su abdomen, estaba sobre sus piernas así que torció la espalda para poder depositar cálidos besos sobre la zona del estómago, bajando lentamente hacia el ombligo y poco después, cuando se hallaba junto a su entrepierna, frenarse para mirarle a la cara.
Los ojos del mayor se veían tan lindos desde ese ángulo, al igual que su rostro, los rasgos rudos desaparecían, ahora lucía extremadamente adorable.

Horacio pasó su mano por el cabello del ruso, apartando algunos mechones alocados que caían por su frente.
Volkov posó las manos a los lados de las caderas del menor, metiendo la punta de sus dedos por el elástico de los bóxers, agarró también este con ayuda de sus dientes y comenzó a sacarlo hacia abajo.
El crestado sentía aquella respiración tan cerca de su miembro que era suficiente para hacerlo jadear deseante.
La imagen de Víktor entre sus piernas era lo más hermoso que podría ver nunca, y con tan solo imaginarse lo que vendría después...

--Ah-- Horacio despertó agitado.
Abrió y cerró los ojos con fuerza para darse cuenta de que todo aquello no había sido más que un sueño plagado de lujuria y realmente él estaba en completa soledad dentro de su habitación.
Su rostro se vio entristecido, pero ya estaba acostumbrado, al menos contaba con una nueva idea para seguir escribiendo su diario.

Era jueves a la mañana, por lo tanto debía asistir a clases.
Volkov le había dejado un mensaje informándole de que no iba a ir al instituto, pues el día anterior ambos decidieron que era buena idea salir afuera y quedarse juntos bajo la gran tormenta, con el frío y la lluvia calando en sus interiores; y el ruso se había constipado por aquello.

No iba a negarlo, le asustaba estar solo en clase, era cierto que también tenía a Pamela y Gael, pero ellos pertenecían a un curso diferente al suyo, solo se veían en el almuerzo.

De vez en cuando los chicos lo molestaban, cuando estaba Víktor no lo hacían, el ruso imponía demasiado y los matones eran concientes de que el muchacho no se pensaría dos veces el partirles la cara si le hacían algo a su mejor amigo.
También cuando Gustabo iba al instituto, él controlaba a los abusones, pero cuando lo dejó no hubo nada que los detuviera.

Por lo general solían gritarle cosas o hablar por lo bajo cuando él pasaba, lo máximo que podían hacerle era llegar a las manos, pero eso era más frecuente cuando trataba de defenderse.

En más de una ocasión Horacio pensó en dejar de asistir a clases, pero su madre le insistía, al igual que Volkov, intentando que no se rindiera.
Su hermano había dejado el bachiller y aún así cada vez que él le comentaba sus pensamientos sobre hacer lo mismo el rubio hacia cualquier cosa con tal de convencerlo para que no lo hiciera, pues el mayor lo dejó porque los estudios no eran lo suyo, en cambio el francés era bastante bueno en casi cualquier asignatura, así que debía aprovechar eso y seguir estudiando.

Aún era pronto, hoy sí que tendría tiempo de darse una ducha mañanera.

Se dirigió al baño. Una vez dentro y con la puerta cerrada comenzó a sacarse el pijama, empezó por la simple camiseta básica levemente desgarrada por algunas zonas, y después continuó por los pantalones largos de aireada tela de cuadros.

Junto a la pared un espejo de pie, donde Horacio podía observar todo su cuerpo, llamaba su atención. Odiaba hacerlo, odiaba verse pues no le gustaba su físico. No era gordo, pero tampoco delgado; no tenía los abdominales ni el pecho marcados, sus brazos se veían fuertes, pero realmente no lo estaban, simplemente eran grandes.
Le encantaría verse como como algunos de los chicos de su clase, con una buena tableta y físicamente atractivos, pero no tenía la fuerza de voluntad para ponerse a hacer deporte.

𝙷𝚘𝚛𝚗𝚢 24/7 𝐕𝐨𝐥. 𝟐 {𝘝𝘰𝘭𝘬𝘢𝘤𝘪𝘰}Donde viven las historias. Descúbrelo ahora