20- Aprobación

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El primer rayo de sol de aquella mañana de junio fue directo a los ojos de Jungkook, el azabache arrugo la cara a modo de queja por ser despertado de esa manera, aquel enfado duro unos breves segundos hasta que escucho el ronroneo de Taehyung, quien se encontraba durmiendo en su pecho con sus manos y sus piernas enredados en él.

Su pelo que lucía más castaño con los rayos del sol , sus mejillas rosadas y su puchero apoyado en el pecho hicieron que el corazón de jungkook explotará de amor. ¿ como alguien que solo dormía se podía ver tan jodidamente hermoso? Y su sonrisa asomo por la comisura derecha recordando los fragmentos de la mejor noche de su vida. 

Cada beso , cada caricia , cada orgasmo hicieron que Jeon Jungkook confirmará que hacer el amor es mucho , muchísimo mejor que solo follar, que besar con amor es tremendamente más placentero que hacerlo por atracción y que ver la cara de Kim Taehyung al despertar es algo que quería hacer el resto de su vida.

Acarició aquel el pelo ondulado del menor, acaricio su mejilla, esas caricias se mudaron a los labios  aún hinchados producto de haber sido devorados toda la noche por su hambrienta boca y los dibujo con su dedo pulgar , cerro sus párpados recordando su sabor, su textura... y se acerco para poder rozarlos por que no quería despertarlo pero tampoco se sentía tan fuerte como para ignorar aquellos preciosos labios que le suplicaban un beso de buenos días.

—Te amo tanto... - susurró mientras inspiraba profundamente el aroma del menor que aún dormía.

 o eso creía.

— Te  amo más — contesto un vocesilla adormilada, regalando una pequeña sonrisa responsable de que él corazón de Jungkook volviera a acelerarse.

— S-Siento haberte despertado, pero te extrañé.

— pero si dormiste conmigo

— Sí,  pero llevo quince eternos minutos solo, mientras tu dormías tan jodidamente tierno y haciendo contenerme las ganas enormes de comerte a besos — puchereo 

— ¡Jungkook! —  exclamó avergonzado por la reclamación tierna del azabache, verlo actuar de esa manera hizo que Taehyung confirmará que las palabras de Jungkook no solo eran eso, el de verdad actuaba de una manera que le costaba comprender por que jamás lo había visto tan tierno, sumiso, tan adorable...

Jeon Jungkook era una persona que sabía hacer pucheros y poner ojitos para conseguir lo que quería, sabía decir te amo y sobre todo sabía transmitirlo. Jeon Jungkook estaba enamorado de él , solo de él y eso hizo que su estomagó pareciera un festival de fuegos artificiales y se abalanzo sobre aquellos labios que seguían divagando sobre su abandono durante esos eternos quince minutos.

— Te amo, te amo , te amo muchísimo Jungkookie. Sacando su lengua juguetona y pidiendo permiso a la del azabache para salir a jugar, a enredarse , a deleitarse , a darse los buenos , buenísimos días y el mayor le correspondió y lo acerco mucho más a él.

No fue hasta que la necesidad de respirar los separó y Jungkook pudo escuchar el el rugido de las tripas de su pequeño

— Ohhh... parece ser  que que mi bebe oso tiene hambre ¿no?, consiguiendo con aquel apodo que su pequeño escondiera su cabeza en el espacio entre su cuello y su hombro mientras se aferraba mas fuerte a su cuerpo susurrando un pequeño:

— Amuur... — puchereo. Solo un poquito, pero prefiero quedarme aquí contigo un ratito más, por fis— suplicaba

Jungkook sabía que aquella timidez de Taehyung era producto de la vergüenza que le provocaba salir al mundo real , salir de aquella burbuja  en la que llevaban metidos doces horas desde que se encerraron dejando al resto desconcertados en el salón ya que Taehyung se despedía para coger un vuelo rumbo a Corea. Y después en un abrir y cerrar de ojos había perdido la virginidad con el amor de su vida , con su mejor amigo con su confidente  que le hizo el amor dos veces más aquella noche y como consecuencia había perdido el control de sus gemidos y sabia, estaba seguro de que todos en aquella casa habían sido testigos de lo que sucedida en su habitación y eso hacía que Taehyung se sintiera el ser más pequeño del universo ¿como iba a mirarles a la cara? , aquel pensamiento solo hizo que Jungkook soltará una pequeña sonrisa mientras miraba de reojo a su pequeño que aún seguía escondido en su cuello.

The last songDonde viven las historias. Descúbrelo ahora