🧸❀nuestro pedacito de cielo❀🧸 TERMINADA

capitulo 38

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Disneyland: una aventura familiar
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Salimos de la habitación con el bebé en su cochecito y paseamos por ahí, aunque también pasamos a un centro familiar dónde podíamos jugar varios juegos, después de unas horas aproximadamente salimos de ahi, Jungkookie y yo íbamos felices y Taehyungie estaba emocionado mientras balbuceaba jugando con los peluches de la máquina de regalos.

Íbamos caminando al edificio muy tranquilos, las noches eran muy distintas a lo que era en Corea, había demasiada gente y eso logró que nuestro hijo se exhaltara así que le pusimos su mantita encima del techo de su cochecito y lo dejamos dormir mientras nosotros paseábamos en la calle, luego de una media hora ya no se escuchaban los balbuceos de mi Taetae así que me asomé y lo ví dormidito, sonreí y le dije a Kook que era mejor regresar al hotel, así que eso hicimos y llegamos inmediatamente a descansar, mañana tendríamos un día familiar muy lindo e inolvidable.

Despertamos aproximadamente a las siete de la mañana gracias a que Taehyungie tenía hambre entonces se quejó pataleando.
Shhhh no pasa nada- Jungkook lo cargó para arrullarlo y sacar de la maleta un termo con agua y lo metió al horno de microondas que  estaba en la pequeña isleta de la habitación.
Maam buaaaaaaaaaa-Tae soltaba quejidos mientras extendía sus bracitos buscando a su mami.

Vamos a dejar dormir a mami ¿Está bien mi niño?-Kook le dijo al pequeño pero éste solo hizo un puchero muy tierno a la vista del mayor.
Una vez que estuvo listo el biberón Kook se sentó en la esquina de la cama para acostar al niño en sus brazos y así empezar a darle la leche.
Shhh shhh come osito bebé- le arrullaba suavemente para dejar que volviera a su estado de somnolencia.

Una vez que pudo hacerlo lo acostó en medio de él y de su esposa y siguió durmiendo al menos media hora ya que el pequeño se despertó de nuevo exigiendo un cambio de pañal y con eso consiguió despertar a su mami que con toda la pereza del mundo se levantó para poder cambiarlo viendo cómo Tae pataleaba juguetón mientras soltaba risitas, ya estaba inquieto y tenía muchas ganas de jugar.

¿Que niño tan más hermoso verdad que si?-una vez que lo terminé de cambiar le hice soniditos en su pancita y así que él comenzara a reír.
Abaaaa guuuuu-estiró sus bracitos para que lo cargara y cuando lo hice se acurrucó en mí mientras succionaba su dedito.
Después me acerqué a la ventana para abrirla un poco y enseñarle al bebé la vista de la ciudad, ahí estuvimos al menos diez minutos y después lo volví a recostar en la cama para buscar en su maleta un conjunto de ropa que sería el que utilizaría hoy.

Préstame tu bracito mi amor- le tomaba suavemente cada uno de sus bracitos y piecitos para poder vestirlo y mientras eso pasaba le hablaba notando que él también intentaba hablar pero solo salían gorgoteos inentendibles.
Una vez que estuvo listo lo dejé en la cama acostado mientras buscaba entre la maleta su fórmula de leche para hacerle un biberón.