- Eh Sirius - le llamé y el se giró rápidamente mientras detenía su escritura - ¿Cómo se siente transformarse? El libro dice que es doloroso la primera vez.
Aquella pregunta pareció sorprenderle pero se limitó a fruncir el ceño y meditar su respuesta. Se veía realmente adorable cuando estaba con aquel aspecto serio y pensativo, no es que no fuese guapo normalmente pero había algo en él particularmente cautivador.
- Si, es doloroso la primera vez, pero luego es placentero - respondió con simpleza y yo está vez me acerqué más a él.
- Define placentero - pedí y el me miró con una expresión que no supe descifrar sin embargo tomó un respiro y dejó lo que estaba haciendo completamente.
- Es complicado y mi respuesta depende de tus propias experiencias, Rosie. Por eso no se si deba responder o no a ello - me dijo mientras me observaba con algo de perspicacia - La transformación es algo muy personal, es tu cuerpo liberándose de pensamientos humanos, ¿me explico?
- Ajá - atiné a decir aún sin entender - entonces es liberador, como cuando respiras luego de un buen rato de no poder hacerlo, ¿me equivoco?
- Si Rosie, puede decirse. Aunque hay otra sensación que se le acerca por mucho, pero...
- ¿Pero que? Vamos Sirius, no es que vaya ir a contárselo a cualquiera - le insistí y el solo cabeceó y volvió a tomar su pluma.
- Eres muy inocente Rosie, no quiero arruinar eso.
Ah ya lo comenzaba a entender. Liberador, personal. Sirius realmente pensaba que yo era tan inocente.
- Oh ya, ¿te refieres a un orgasmo? ¿Así de liberador?
Pude haberme carcajeado en su cara, pero, realmente solo quería disfrutar de ese pequeño instante dónde Sirius parecía total y absolutamente fuera de lugar. Se giró hacia mi con el rostro del color de mi cabello y su boca entreabierta, probablemente intentando pensar que decir sin arruinar nada, cosa que realmente no era nada parecida a él.
- Pensé que...que...bueno que tú...
- No he estado con ningún chico si es lo que imaginaste por un instante, pero, no es como si tocarme por mis medios no fuese excelente para liberar mi estrés por estos malditos exámenes.
No sé si lo dejó atónito mi pequeño desdén actual por los exámenes o todo en general. Había una parte de mi que odiaba no poder pasar todo ese tiempo tonteando con Sirius, aunque el era muy buen compañero de estudio y me arrastraba a la biblioteca en los horarios que habíamos pautado, diciéndome al oído siempre tendremos tiempo por el resto de nuestras vidas Rosie, mueve tu culo a la biblioteca. No es que fuese el más delicado, pero su romance compensaba su terrible sentido del humor.
- Oh, bueno...
Esto era nuevo, un Sirius que parecía fuera de su elemento. Quizás el lado malvado en mi quería pincharle un poco más, tentarle al máximo.
- Quizás un día puedas ayudarme con eso - le dije y sabía que mi rostro estaba sonrojado, tanto como el de él quien alzó una ceja y se mordió el labio inferior y luego volvió su vista al pergamino, decepcionandome un poco.
- Eso...eso lo veremos, Rose. ¿Terminaste ya tu parte? - preguntó sin mirarme y yo bufé volviendo a mi pergamino - Siento tu molestia vibrar hacia mi, Rosie, pero, ¿cuál quieres que sea mi respuesta?
- No lo se, quizás que tontees conmigo un poco, se supone que en tus tiempos eras un rompecorazones con bastante experiencia - le dije con algo de amargura.
- Rompecorazones o no como lo dices Rose, no es tu corazón el que quiero decepcionar ahora - soltó con total firmeza - Ya no soy el que era hace mucho y eso me lo recuerdas siempre, sobretodo en momentos cómo este.
- ¿Ah sí? - suspiré y sentí su mirada clavarse en mi para luego volver a lo suyo - ¿Que habrías hecho antes?
- Rosie - gruñó y yo rodé mis ojos.
- Solo tengo curiosidad, no es como si no pensara en eso, tu y yo...en situaciones más íntimas - solté con la poca valentía que me quedaba a estas alturas - Siempre escucho a Molly darle los detalles a Lucy, no es como si tuviese cinco años por amor a Merlín. ¿Acaso tú no...?
- Tu eres la chica de mis sueños y mis pesadillas cuando de pronto empiezas a reñirme por no estudiar - me dijo con una media sonrisa - ¿Cómo podría no pensar en ti de esa manera? A veces es...ya sabes, complicado detenerme cuando nos besamos en la sala de Menesteres.
- Lo se, pero...
- No está en discusión Rosie, podemos ir despacio, no hay presión sobre nada de eso - sus ojos aún seguían en el pergamino y yo le hice mirarme - Joder, no me mires de esa forma Weasley, por amor a mi cordura.
- Quiero ir despacio, pero podríamos probar ciertas cosas antes, ¿no? ¡Vamos Sirius! Albus y Nora están en ello todo el tiempo.
- No es una competencia - me recordó y alzó una ceja de forma arrogante - Rosie, ¿en serio quieres que avancemos tanto como para eso?
- No quiero hacerlo porque los otros lo han hecho, es solo que...se me hace complicado no pensar en ello cuando estamos solos, ¿por qué quieres ir tan despacio? Pensé que los chicos...
- Te amo Rosie, está vez no quiero arruinarlo, no contigo - suspiró y cerró sus ojos - Nunca había tenido una novia realmente, no se que tan rápido o que tan lento debería ir, solo no quiero que pienses que...
- Oh, no, no. No lo pensaría - dije rápidamente - En serio, realmente. Está vez soy yo quien te pide que intentemos algo diferente. No es como si no lo pensara, es complicado verte y no...- mierda había hablado demas. Lo noté al ver la sonrisa divertida en el rostro de Sirius y aquella mirada arrogante - Es tu culpa ser tan guapo.
- ¿Mi culpa? Quien lo pensaría - rió mientras alcanzaba un libro - La dulce e inteligente prefecta Rose Weasley-Granger me quiere de objeto sexual para calmar su estrés por los exámenes. ¡Deberías sentirte avergonzada señorita!
- Bah, el sexo debería ser considerado algo relativamente normal entre los adolescentes - dije mientras acomodaba mis lentes un poco, odiaba tener que usarlos cuando mi vista se cansaba, aunque Sirius los consideraba adorables.
- Que liberal me has salido, no es que me moleste, pero, ¿quién diría que debajo de esa imagen de niña dulce estaría la chica que anda pidiéndome ir más rápido? - Sirius sonrió en lo que me pareció una expresión feliz - ¿Puedo preguntarte algo?
- Lo que quieras - dije mientras comenzaba nuevamente a escribir.
- ¿Te liarias conmigo sino fueses mi novia?
- No - respondí sin más y con total seguridad y aquello pareció hacerle feliz - Por muy guapo que seas no me liaria contigo solo por ser tu.
- Excelente respuesta - admitió y dejó un beso en mi mejilla - Entonces...
- Entonces, ¿qué?
- Nada, solo ya sabes, has estado en estrés de exámenes últimamente, eso quiere decir que...
Me sonrojé y supe que ese era su fin, hacerme sonrojar como una idiota. Alzó una ceja algo arrogante y siguió escribiendo mientras leía rápidamente el libro levitando frente a él.
- ¿Que intentas decir?
- Nada, se saber que estabas tan estresada, habriamos discutido tus técnicas de relajación mucho antes.
- Idiota - sisee más que todo avergonzada.
- Soy todo tuyo, mi corazón y el resto de mi cuerpo, puedes hacer de mi lo que gustes solo cuando terminemos estos jodidos deberes - siseó con un deje de molestia aunque sabía que ya estábamos cerca de terminarlos.
- ¿Lo que sea? - pregunté mientras sonreía hacia él, quien se giró a verme y me devolvió el gesto asintiendo - Bien, acaba rápido con los tuyos y yo veré qué hacer con esto. Confío en tu palabra Black.
- ¿Cuando te he decepcionado?
❤️
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Desde el Velo - Marauder's Story
Fiksi PenggemarLa vida nos devuelve lo que perdimos, de la forma en que menos esperamos.