09: Un par de cobardes.

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¿Cómo iba a dormirse si se sentía tan fuera de lugar? No paraba de dar vueltas en la cama, bajo las mantas grises de la cama de Eunbi sin dejar de pensar que todo era sumamente extraño. Llevaba cerca de una hora intentando conciliar el sueño, ni boca arriba, ni para un lado ni hacia el otro. ¡Era imposible!

La puerta se abrió un poco y ante el chirrido que hizo, Jaehyun se giró para ver. Era Eunbi, entrando con los pantalones del pijama y una sudadera roja, sin hacer mucho ruido.

—¿Qué haces aquí? —Preguntó Jaehyun.

—Perdona, ¿te he despertado? —El chico negó.

—Que va, todavía no me he dormido.

—Pues ya somos dos. —Eunbi caminó hacia la cama y Jaehyun se sentó en el colchón. —Además, si duermo ahora por la noche no creo que vaya a dormir nada. —El chico asintió de acuerdo. —¿Por qué no puedes dormir tú? —Preguntó.

—Ah, ya ves Eunbi, la cama se me queda grande si no estas aquí, ha de ser eso. —La chica le golpeó la pierna bajo las mantas. —¡Es broma!

—Serás idiota, de verdad.

—Es que... No sé, es tu cuarto y es raro. —La rubia se sorprendió ante su afirmación.

—¿En serio? Porque tendrás que dormir aquí las próximas semanas. Tendrás que acostumbrarte.

—¿Cómo voy a dormir? Me iré a casa de mis padres y volveré temprano por la mañana.

—No, no, sería extraño y mi familia haría muchas preguntas. Tengo un futón viejo por aquí. —Se levantó y caminó hasta el armario. —Puedes dormir aquí. Te dejaré algunas mantas y solucionado, luego lo recogeremos por la mañana y nadie se dará cuenta. —Jaehyun asintió. —Jaehyun... lo que has dicho antes, en el salón, ¿era verdad?

—¿Te refieres a si soy un novio modelo que no saca menos de un nueve? —La actitud burlesca y prepotente del chico regresó de vuelta. Eunbi asintió poniendo os ojos en blanco. —Sí. ¿Por qué?

—¿En serio? En clase siempre te echan la bronca por hablar, te echan del aula y... ¿alguna vez has pisado la biblioteca? —Jaehyun se pasó la mano por el pelo. Claro que había pisado la biblioteca. Las veces suficientes para saber que ella solía sentarse en una mesa cara al sol con Soyoung, Rachel y Madison.

—¿Por qué sabes tan bien qué pasa conmigo en todo momento? —Bromeó. —¿Tanto te gusta? ¡Qué obvia eres Eunbi! —La chica como estaba empezando a acostumbrar, reprimió el impulso de pegarle.

—Eres...

—¿Atractivo, guapo, carismático, gracioso, entretenido, lo mejor que te ha pasado en la vida?

—...Un autentico gilipollas. —Jaehyun le lanzó un peluche. —¡Eh!

—¡Ya imaginaba que dirías algo así! —El castaño fingió sentirse ofendido.

—¿Sabes Jaehyun? Si no fueras un completo idiota, tal vez en otra vida, hubiéramos podido ser buenos amigos. —La sonrisa de Jaehyun se desdibujó con lentitud del rostro. —¿A qué viene esa cara de muermo?

—¿No crees que podamos ser amigos si soy así? ¿Tendría que cambiar para llegar a ser tu amigo? Joder, que exquisita eres, Eunbi. —Se cubrió con las mantas y volvió a tumbarse en la cama dándole la espalda a la chica. Aquella estúpida afirmación, le había atacado y ofendido de manera personal.

—¿Te vas a enfadar por eso? ¡Es la verdad! —Jaehyun estiró las mantas cubriéndose hasta las orejas. —Es que joder, ¿no piensas en otra cosa que no sea el jodido sexo? ¡siempre con los chistecitos de doble sentido! ¡y jugando con todas las chicas!

Un mes por contrato. |Jung Jaehyun ;; NCT|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora