Cuando sus clases habían acabado se apresuró para llegar la biblioteca puntual a una de sus últimas citas de estudio antes de las vacaciones de navidad con sus amigas. Caminaba rápida por los pasillos con el objetivo en mente de llegar a la facultad de derecho, donde siempre había mesas vacías, antes de que el turno de Nathalie, la bibliotecaria amable, terminara y llegará el antipático señor Phills.
Llegó justo a tiempo. Nathalie estaba recogiendo sus cosas y la saludo con la mano en silencio. La biblioteca de la facultad de derecho era enorme y en ella se podían encontrar todo tipo de libros. Altas estanterías se erguían de punta a punta de la enorme sala y en medio, de manera ordenada, había mesas largas de madera de cerezo con lámparas de color esmeralda para ayudar a estudiar a los y las estudiantes de todo el campus.
Divisó a Soyoung y las demás en una mesa, había bastante gente pero sabía que sus amigas le guardarían un sitio y antes de sentarse con ellas, caminó hacía una de las estanterías que tenía ya fichada para encontrar el libro Sobre la evolución de Huxley para terminar su trabajo de marketing.
Le costó un poco dar con el libro que buscaba entre tantos montones y montones de libros y tuvo suerte porque era uno de los pocos ejemplares que quedaban. Con el libro bajo el brazo caminó hasta la mesa, Soyoung le saludo y se acercó para dejar caer el libro en el sitio libre al lado de su mejor amiga.
—Ah, no, no amiga. Búscate otro sitio. —Unas manos arrastraron el libro de Eunbi hacia el asiento de en frente, justo al final de la mesa, y la chica levantó la mirada para encontrarse con el usurpador de sillas. Le miró levantando una ceja en alto y volvió a arrastrar el libro hasta el sitio en el que originalmente, Eunbi se iba a sentar.
—Márchate tú Jung. Yo he llegado antes. —Se mantuvo firme delante del chico, no iba a ceder ante él.
—Mi culo ya está sentado. Así que piérdete Moonbi. —Apartó el libro una vez más y Eunbi tomó aire con enfado. Aquello no lo iba a tolerar, no en un día como aquel con todas las cosas que tenía encima y menos aun si un desalmado como Jung Jaehyun, con quien desgraciadamente compartía algunas clases, decía mal su nombre.
—Que te pires. —La rubia insistió apretando los dientes y Soyoung se vio obligada a intervenir.
—Jaehyun, por favor. ¿No puedes sentarte en frente? —Pidió en un susurro la castaña. El chico negó y ambas suspiraron con pesadez.
—¡Que no! ¡Que me hago sombra y me tapo el libro! —Recriminó.
—¡Como si supieras leer! —Eunbi se sentó con desdén en la silla libre que quedaba en frente de Jaehyun, molesta porque no tenía a su amiga cerca para conversar y tenían que hablar de las últimas nuevas sobre la decisión de Eunbi moviendo los labios e intentando interpretar lo que decía la otra. —¡No te entiendo! —Susurró.
—¿Que qué vas a hacer al final? ¿Has encontrado a alguien? —Eunbi negó. —Entonces, ¿le dirás la verdad a tu familia? —La chica volvió a negar. —¿Qué cojones, Eunbi?
—Creo... Creo que tengo que buscar a alguien. —Susurró. —Será solo un mes, incluso menos ¡solo tres semanas! —Comenzaron a ganarse las miradas del resto del alumnado que también había aprovechado a estudiar para los últimos exámenes del semestre. —¡Pero no sé a quién!
—Chicas por favor, hablad luego. —Las dos se giraron hacia la voz que habló en la silla a la izquierda de Eunbi. Era su amiga Rachel que les pedía callar.
—Ey, Rachel... —Comenzó a decir Eunbi. La chica, cuyo pelo estaba repleto de mechas rosas, frunció el ceño ante la llamada de su amiga. —¿Podrías hacerme un favor?
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Un mes por contrato. |Jung Jaehyun ;; NCT|
FanficEunbi tiene que regresar tras estudiar cuatro años en el extranjero a casa. Se muere de ganas de volver a ver a su familia y sobre todo, a su hermano mayor. Pero hay un factor que aun no sabe cómo sobrellevar: Les ha dicho a todos que tiene pareja. ...