Kara ve a Lena llorando, quiso correr hacie ella pero sabía que empeoraría las cosas, así que se contuvo y se dirigió a su madre.
K: mamá.
L: dime
K:perdón, no quería que tú y mamá se separaran por nuestra culpa. Pero también deben de entender que lo que sentimos Lena y yo es real. Sé que está mal, lo sabemos, pero no queremos separarnos. No de esta manera. Le comentaba a Lena hace semanas que siento que de forma sanguínea no somos hermanas.
L: estupideces
K: piénsalo mamá, fisicamente no me parezco a ustedes. Por favor, no te enojes.
L: mañana te haremos la prueba que quieres, pero quiero que sepas algo muy importante, Kara.
K: dime, madre...
L: digamos que esa prueba sale negativa y que Eliza ni yo somos tus madres, quiero que sepas que no por eso dejarás de ser nuestra hija, porque te criamos como una y te amamos como tal; pero también, si es así, si no resultaras ser nuestra hija, entonces hubo un cambio de bebés en el hospital hace años.
K: siempre he creído que eso pasó. Porque sé que mamá sí se embarazó, ni para decir que soy adoptada.
L: aún no nos precipitemos
K: y si resulta ser así, si resulta que no soy su verdadera hija, buscarían a quién lo es?
Lilian se quedó en silencio unos segundo.
L: repito, no nos precipitemos.
K: y qué pasará con Lena y conmigo?
L: todo a su tiempo
K: madre...
L: dime
K: me puedo quedar a dormir aquí? Bueno, mamá y yo podemos quedarnos a dormir?
L: también es su casa.
K: no se separen por favor, por favor. Ustedes se aman, lo sé, lo sabemos Lena y yo, ustedes siempre han sido nuestro ejemplo a seguir. No se separen.
En eso, se escucha como un auto se estaciona frente a la casa, era un taxi y de él baja Eliza.
Lilian no pudo aguantar y salió corriendo a abrazar a su esposa. Lena hizo lo mismo, corrió a brazos de sus madres.
