Capítulo 15

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Advertencia

No se me asusten, tranquis bebés.
No es nada malo, solo es una aclaración.
El método de "orar por tu futura pareja y ponerle señales a Dios para saber si es el/la indicado/a" es algo que yo he puesto en práctica en mi vida personal y creo en ello.
Se que hay gente que no cree que esto funcione, y hay muchos argumentos. Esto no es una regla de fe o una doctrina, es simplemente algo que hacemos con tal de agradar al señor a la hora de tomar la decisión más importante de nuestras vidas (luego de dejar que el señor entre en tu vida, claro)
En el evangelio hay todo un mundo de personas y denominaciones, lo importante en sí no es el asunto de hacer determinada cosa para que Dios obre, sino, de tener a Dios sumamente presente a la hora de tomar una decisión.

Y ya, eso era todo por ahora.
Un abrazo

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Capítulo 15

Para mi sorpresa, mucha gente asistió a la inauguración de mi respostería y antes de continuar debo hacerles una confesión. 

Invité a Jared, pero él no me confirmó si venía o no, así que le oré a Dios, en medio del local, con mi ayudante mirándome como si estuviera loca y con las manos fervientes frente a mi pecho elevé una oración desde lo más profundo de mi alma. 

“Señor, te pido de señal que si viene signifique que es el mío y sino, pues entonces ayúdame a aceptar tu voluntad”. 

Cuento esto como testimonio, porque para mi gran satisfacción, luego de presentar a todos en pequeños panfletos, los postres generales de la pastelería, él apareció entre la multitud con una sonrisa preciosa. 

Mi corazón bombeó fuerte y no pude evitarlo, mientras se acercaba entre la multitud persistía en mí el inmenso deseo de que me abrazara. 

Dios es grande y su misericordia es infinita, él me respalda y me responde hasta en cosas tan pequeñas como esta. 

Jared llega a mi encuentro y me da un abrazo breve, desde que supo todo, se ha empeñado el doble en no hacerme sentir incómoda, y yo peleando con mi corazón para que no me delate. 

Quiero quedarme entre sus brazos y reconocer esto me causa un leve rubor en las mejillas. Si nota que el ambiente cambia, no dice nada.   

—Hay mucha gente mija.

—Ay sí mijo.

—¿Estás contenta? 

—Mucho.

—Eso es lo importante.

—¿Quieres algo? 

—¿Hiciste volteado*? Sabes que me encanta como lo haces. 

—Ya te traigo, siéntate. 

—Cuando ser acabe la reunión te voy a decir algo.

—Ok, hablamos ahora, espérate.

¿Por qué será que uno piensa en cosas malas cuando le dicen eso?

Le sirvo su postre y luego de dejárselo me dedico a atender a más clientes. Lissandro me ayuda con algunas cosas y me siento feliz de verlo colaborando. 

Todo está simplemente… perfecto. 

Entonces ¿Por qué me siento inquieta como si algo malo fuese a suceder?, ¿o es solo ansiosa por lo que sea que me va a decir Jared? No lo sé y no estoy segura de querer averiguarlo.

Los jóvenes de la iglesia se ofrecieron de voluntarios para ayudarme con los quehaceres luego de que la gente se fuera y Manuel, muy orgulloso de mi nuevo proyecto, nos invitó a todos a su casa para seguir celebrando. 

Si Las Rosas Se Marchitasen #PGP2022Donde viven las historias. Descúbrelo ahora