EGOIST-MITHEL LA PEOR BRUJA

7

Narrador omnisciente

El sol esclarecedor anunciaba la llegada de un nuevo día para todas las brujas en la academia Cakle y como era costumbre Mildred se encontraba de camino a su primera clase mientras caminaba junto a sus mejores amigas, Enid y Maud, a la vez que platicaban acerca de cosas triviales.

— Ya te dije Enid vas a explotar el salón de pociones si mezclas esa cantidad de baba de sapo en el caldero — advertía la chica de complexión robusta a su amiga de piel oscura.

Aun así la Nightshade hizo caso omiso a las advertencias de su amiga.
— !Increíble!, eso lo hará más emocionante — habló eufóricamente Enid.

Maud tan sólo giró los ojos sabiendo que Enid era una causa perdida y que tan solo aprendería por las malas.

Mildred únicamente reía por lo bajo debido a las ocurrencias de sus amigas hasta que llegaron al salón de artes en el que ya se encontraban algunas alumnas junto con Julie Hubble quien era la maestra de artes.

El grupo de amigas entró al salón y cada una se dirigió al lugar que les correspondía, Enid y Maud continuaron platicando mientras Mildred se vio sumida en sus pensamientos al saber todo lo que había ocurrido con Ethel los últimos dos días pues la rubia había estado rara. La castaña tan solo se sumió en aquellos pensamientos de preocupación, sabía que la rubia era mala de cierta forma pero mientras buscaban los fragmentos de la gema, sintió que algo estaba mal con Ethel. Y esta vez no era su actitud o sus maldadosos planes sino más bien como si hubiese algo que le aquejaba y que le hacia daño, de alguna forma sintió preocupación por ella.

— Millie, porfavor has a Enid entrar en razón y dile que no puede siquiera hacer una explosión así de grande — habló Maud a la castaña pero esta se encontraba profundamente inmersa en sus pensamientos acerca de la rubia, aun así la chica de lentes intentó nuevamente — Millie,
Millie — de todas formas fue inútil.

— ¡Mildred! — Exclamó Enid a su amiga para que su mente se concentrara en la conversación.

En ese momento la  dio un salto exalta y miró para todos lados antes de ver a sus amigas aun desorientada. — Estoy aquí — .

— Millie, ¿Hay algo que te
preocupa? — preguntó con curiosidad Maud.

— No, nada — dijo por lo bajo la castaña.

Entonces Enid intervino poniéndose frente a Mildred  — o ¿En qué piensas? — también de forma curiosa la chica Night le preguntó a su amiga, — Más bien dicho ¿En quien
piensas? — finalizó de manera pícara Enid.

La chica de listón rojo se exaltó por la mirada de su amiga pues estaba mal interpretando cosas, pero aún así no pudo replicar debido a que la señorita Julie estaba por comenzar la clase.

Todo transcurría con normalidad hasta que Mildred miró a su derecha y no vio a la rubia en su puesto, aquello le pareció extraño y a la vez preocupante debido a que Ethel nunca faltaba, pues conociendo su nivel de competitividad odiaria  retrasarse. Aún así la castaña intentó seguir la clase con normalidad mientras se decía a si misma que Ethel probablemente había tenido contratiempos para llegar a la clase y probablemente estaría en la siguiente sin falta.

Aun así, la clase de arte había finalizado y ya habían pasado algunas horas de clase en clase pero aún asi la rubia no hacia aparición. Y aunque en ese momento se encontraban en el receso, la mediana de las Hallow tampoco apareció para comer algo.

Mientras Mildred caminaba por los pasillos en dirección al patio principal, su mente se volvió a llenar de pensamientos.

quizás la señorita Cakle la suspendió por llegar tan tarde a la academia.