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Narra Mildred

Ante el ultimátum de Maud y la burbuja Hallow apoderándose de mi mente, este día había sido desastroso y el siguiente tenía toda la pinta de ser igual. Aun así me puse de pie como todos los días y di mi mejor sonrisa para afrontar el desastre mental y las clases que tenia.

Como primer número del día tan sólo fui al comedor donde estaban las misma brujas de siempre y la misma comida rara y fría que quitaba el apetito a cualquiera. Talves la única gran diferencia era la ausencia de Maud quien no fue a mi habitación a saludar ni mucho menos a recordarme todas las tareas que tenía por terminar y de alguna forma su ausencia hizo un hueco en mi corazón, pues era un día común pero un poco gris.

Debido a todo eso, durante el desayuno me mantuve callada y con la cabeza gacha tan sólo limitandome a comer. Al menos hasta que a la salida del comedor me encontré a Enid.

— No te había visto en todo el día — Casí suspiré de emoción sabiendo que ella era la única a mi alrededor que no me traía un drama existencial.

— Dejemos los saludos de lado, ¿Has visto a Maud? — cuestionó cortandome la frase.

— Se tanto como tú — .

Enid sólo se limitó a resoplar y cruzar los brazos. — Bien entonces pasemos el día juntas antes de... — se detuvo un momento a sopesar lo que iba a decir y me miró como temiendo que yo supiera algo.

— ¿Antes de? — .

— Nada, antes de que Hardbroom quiera hacer un examen sorpresa y ambas reprobemos — Claramente Enid era un desastre absoluto para decir alguna mentira pero sabía que si insistía no me diría nada.

De aquella forma nos dirigimos a tomar clases y durante un largo rato me mantuve ocupada, al menos hasta que la señorita Bat se quedó dormida y mientras divagaba recordé mi planeado encuentro con Maud y el hecho de que había dejado a Ethel sola con eso.

Me puse de pie dispuesta a salir del aula sabiendo que la señorita Bat ni siquiera lo recordaría, mas un brazo me tomó de la parte inferior de la falda y me atrajo con habilidad hacia ella.

— ¿A dónde vas? — Preguntó Enid en un susurro temiendo despertar a nuestra profesora.

Estuve por escupir la respuesta sin más hasta que recordé que ella no me había querido decir lo que ocultaba a la hora de la cena. — Si me dices que ocultas te diré a donde voy —.

Enid soltó mi falda y en su lugar tomó mi brazo dirigiéndome afuera del aula. Estando afuera se forzó a tomar una sonrisa relajada y me miró.

— Dejando de lado los secretos, tengo un pequeño Quiz para ti Mildred Hubble — Me señaló con el dedo índice mientras forzaba un tono divertido.

Me limité a guardar silencio y mirarla sabiendo que algo escondía, pero tan sólo me arrastró por los pasillos de la manera más 'amigable' que podía tener Enid. — Pregunta número uno — canturreó mientras posaba su brazo alrededor de mi hombro — Digamos que David viaja a ochenta kilómetros por hora en una escoba dañada, bajo la tormenta, dispuesto a recuperar al amor de si vida que es su novio Harry. Pero choca frente a un árbol de cinco metros y se rompe su escoba. ¿Qué piensas acerca de que la pareja de David sea un chico? — Finalizó con una sonrisa incómoda que me dejó analizando demasiadas cosas.

— Que es triste que se hayan separado si su amor era puro — Dije más en tono de pregunta que como una respuesta.

Estaba por protestar y pedirle a Enid que me dejará continuar mi camino pero la misma puso el dedo índice sobre mis labios y continuó con su raro cuestionario. — ¿Qué harías si un día llega tu prima adorada a la que no has visto en cinco años y con la que has pasado toda tu infancia, y te confiesa que se enamoró de su mejor amiga de la escuela?. —

EGOIST-MITHEL LA PEOR BRUJA Donde viven las historias. Descúbrelo ahora