Extra.

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- Jungkook deja de saltar, ya van dos veces que te peinan. - Jin tomó por los hombros a su amigo.

- ¿No lo entiendes? Me voy a casar con el hombre más hermoso de la tierra.

Kim volteo los ojos. - No te estás casando conmigo Kookie...

- Muy gracioso.

- Como sea, no vinimos hasta Taiwan Para que te arrepientas.

- No utilices mis argumentos en mi contra Seok.

Jungkook estaba desesperado porque la ceremonia iniciará. El estaba 100% seguro de casarse. De lo que tenía miedo era que su Adonis lo plantara.

- ¿Me veo bien? - Jungkook quién recientemente se había teñido de Rubió, vestía un hermoso traje negro a su medida, haciendo que resaltará su penetrante mirada obscura.

- Te ves precioso. Ya te lo he dicho.

Suspiró y caminó junto a su padrino al altar, quedó ahí frente al padre, esperando al hombre de sus sueños.

Ahí venía, Jungkook sintió que su corazón se paralizó cuando diviso al ahora peligris. Era hermoso, parecía un ángel con ese traje blanco.

Estaban frente a frente, perdidos en su mundo. Todo a su alrededor desapareció, pronto, no había nada ni nadie. Solo ellos dos parados en el altar, declarando sus votos de amor.

- Acepto...

- Acepto...

El beso que se dieron fue eterno y a la vez fugas, lleno de amor y sinceridad.
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- Felicidades Chicos, Jeon. Debo agradecer que desde que llegaste a la vida de mi Chimin el se haya apegado más a nosotros.

- Gracia, madre. La familia es lo más importante... - Jungkook llamaba así a su suegra ya que por órdenes de ella debía hacerlo.

Jimin sonrió y apretó más de la cintura a su ahora esposo. - Hablando de familia, amor... Te tengo una sorpresa.

- ¿Un carro?

Jimin abrió los ojos como plato. - ¿Otro...?

Jungkook carcajeo. - Bueno, que otra sorpresa sería...

- Bueno, vamos.

Jimin lo llevó a un lugar un poco retirado de la fiesta.

- Buenas noches, chicos...

- Papá...

El Sr. Jeon se acercó a su hijo y le dió un abrazo inesperado.

- Felicidades, te deseo toda la felicidad de este mundo.

- ¿Hablas en serio?

- Perdóname hijo. - Se separó de el

- Yo... Los dejó un momento.- Jimin interrumpió para regresar a la fiesta dándoles privacidad.

- Me alegro de que hayas conseguido a alguien como el, que te cuide y es capas de dar la vida por tí.

- Supongo que hubiera sido mejor que fuera mujer ¿No?

El Sr. Jeon suspiro. - Perdóname, yo... Estaba segado, pero, cuando ví lo que ese chico hizo por ti me di cuenta de que sea hombre o sea mujer amor es amor...

- ¿Y esperaste casi dos años para decirme esto? - Jungkook alzó una ceja.

- Vamos, yo intenté contactarte y tú solo me evadidas...

Volteo para todos lados. - Yo... Lo siento por eso, estaba dolido, supongo.

- Te amo hijo. - Se acercó de nuevo al joven para abrazarlo, está vez fue un abrazo correspondido.

Yo tengo el control (Kookmin)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora