Joshua Hong odia las cosas del amor, y sobre todo, los novios. Su madre desea que tenga una pareja para que así sea feliz y deje de ser tan antipático, así que decide "alquilar" a un chico con una preciosa sonrisa, Lee Seokmin, para que sea el novio...
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Joshua no sabía por qué, pero cuando salió de su primera clase del día, lo único que podía pensar era en la bonita cara de Seokmin.
Sacudió su cabeza, fastidiado, mientras saludaba a Mingyu con los labios fruncidos.
Su amigo pareció notar enseguida que algo no iba bien porque lo miró con una ceja encarnada, pero Joshua no tenía ganas de decirle algo, no ahora.
¿Cómo le iba a contar que su mamá le estaba pagando a un chico para que fuera su novio? Eso no sólo sonaba irreal, sino también estúpido y desquiciado.
Seungcheol apareció de pronto de la mano de su novio, Jeonghan, y al notar lo irritado que se veía él lo miraron con curiosidad, queriendo saber qué ocurría, pero Mingyu se encogió de hombros diciéndoles de esa forma que tampoco tenía idea de algo.
Y, por supuesto, ahora que Joshua conocía a Seokmin, y sabía qué estudiaban en la misma universidad, encontrárselo resultaba inevitable.
No cuando Seokmin tenía una risa tan escandalosa, una presencia tan brillante que hacía que todo el mundo le mirara.
Así que cuando salieron al patio a tomar un poco de aire, se lo encontró abrazado a un pelinegro con cara de gato, ambos debajo de un árbol, como si estuvieran en un momento íntimo entre los dos.
Como si fueran novios.
La sangre de Joshua hirvió por completo, pero no tenía claro por qué.
Seokmin soltó una risa por algo que había dicho el cara de gato, y acto seguido se recostaron sobre el césped, sin dejar de abrazarse el uno al otro.
—Joshua, ¿a quién quieres matar ahora? —preguntó Mingyu irrumpiendo sus pensamientos que incluía un cuchillo y veneno para gatos.
—Si les dijera que tengo novio, ¿cómo reaccionarían? —murmuró sin dejar de mirar a la pareja, que hablaban en voz baja, sin dejar de mirarse.
Seungcheol escupió el agua que había estado tomando sobre el pobre de Jeonghan, que chilló por el asco mientras Mingyu se ahogaba con su saliva.
—¡Lo siento, lo siento ángel! —dijo Seungcheol buscando un pañuelo en su bolsillo mientras su novio lo miraba con odio mal disimulado—. ¿De qué mierda estás hablando?
Joshua fulminó con la mirada a Seungcheol, que se encogió en su lugar debido a que estaba rodeado por un novio que quería matarlo y un amigo que parecía psicópata.
—Eres asqueroso, Cheol —dijo Jeonghan quitándole el pañuelo—. Bueno, si Joshua quiere un novio, bien por él, a ver si le quita esa cara de aburrido que tiene.
Ahora los ojos de Joshua se movieron hacia el más alto, que lo miró con desafío.
El pelinegro soltó un resoplido para luego ponerse de pie, alejándose.
Los tres amigos observaron el momento en el que Joshua se acercaba a paso furioso a dos chicos que estaban abrazados bajo un árbol, uno de ellos lo miraba con sorpresa para luego sonreír y exclamar "¡ciervito!", para luego gritar apenas Joshua agarró al pelinegro y lo lanzó lejos. Atónitos, siguieron viendo a su amigo tomar al muchacho con cara sorprendida por el cuello de la sudadera, arrastrándolo hacia ellos, y sentarlo a su lado a pesar de sus protestas.
—Él es Seokmin —dijo rechinando sus dientes—, y es mi novio.
Seungcheol volvió a escupir sobre Jeonghan.
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
