𝐁ucky barnes | ❝dos corazones de cristal que se necesitan el uno al otro❞
donde artemis y bucky tienen una amistad caótica que los destinará a estar juntos, pero ninguno se da cuenta de ello hasta que comienzan a vivir en la misma casa.
ó
donde a...
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CAPÍTULO DIECISÉIS; EL NUEVO CAPITÁN AMÉRICA.
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[capítulo totalmente editado, me refiero a que tiene una trama diferente debido a que agregué un nuevo personaje que para este libro es x pero para el fic que estoy escribiendo de Peter Parker es esencial. nuevamente perdón a las lectores viejas ;( ]
SI ALGO JAMES BUCHANAN BARNES recordaba perfectamente de su yo de los cuarentas,era que le encantaba pintar.
Recordaba que cada vez que tenía la oportunidad de pintar uno de los dibujos que hacía su mejor amigo no la desaprovechaba para nada. Tal vez pensó que después de la guerra, en una realidad alternativa donde nada de lo que ocurrió luego le hubiera sucedido, se hubiera dedicado a la pintura.
Era algo que lo relajaba. Podría pasarse horas pintando un simple dibujo hecho por alguien más o de los famosos libros para colorear. El dibujar no se le daba muy bien, intentaba dibujar algo elaborado pero siempre le salía mal o alguna parte le salía torcida. Sin embargo, Artemis era la que era algo buena en el dibujo.
Una vez, luego de una misión de casi tres horas, Steve Rogers y Artemis Jones estaban tomando un descanso en una de las salas de S.H.I.E.L.D, ahí fue cuando vio por primera vez a Steve haciendo uno de sus tantos dibujos, fue cuando le preguntó cómo era que los hacía, y literalmente el rubio no esperó ni dos segundos para enseñarle todo lo que sabía con esa emoción que lo caracterizaba.
Si no hubiera sido por él, probablemente sus dibujos a esa altura hubieran sido muñecos hechos de palitos y casas totalmente torcidas, claro, no era tan buena como Steve, y tal y como James, solamente lo hacía por pasatiempo y a lo mejor que le quedara. Ya hasta había pensado que lo suyo no era el arte si no el deporte, aunque aun así no le gustara hacer ejercicio. Era algo extraño que hacía a Artemis Jones, Artemis Jones.
Sus dibujos siempre fueron en blanco y negro, pues nunca se animaba a pintarlo con el miedo a arruinarlo, de todo, era lo que peor se le daba, por lo que, después de varios años, sólo dejó que fuera James Barnes quién pintara finalmente todos los dibujos que había realizado.
Ambos se encontraban sentados en la mesada de la cocina. James pintando un viejo dibujo que Artemis había hecho mientras que la castaña estaba dibujando otro nuevo. Había un tazón de palomitas en medio de ambos muchachos, era ley, tener algo de comer mientras uno dibujaba y el otro pintaba. Era un buen pasatiempo para así pasar tiempo juntos. Y ninguno se quejaba o se negaba a eso.
De repente, Artemis se levantó sin decir nada de la mesada dejando de lado el lápiz de dibujo que utilizaba, James no le prestó tanta atención por lo que solamente siguió pintando el dibujo que la oji-miel había hecho con anterioridad, no fue hasta que escuchó una maldición proveniente de la chica que alzó su mirada azulada hacia ella.
