Un policía y un sicario culpados de complicidad en un asesinato.
A pesar de sus diferencias deberán unir fuerzas para probar su inocencia...pero en el camino a ello surge algo más.
¿Pueden dos hombres seguros de su heterosexualidad empezar a cues...
Por la mañana apenas puso un pie fuera de la celda, Jungkook se dirigió inmediatamente a la enfermería, Jimin ya había despertado.
- ¿ Estás bien?,¿ te duele algo?- preguntó atropelladamente Jungkook.
Jimin sonrió.
- Sí, me duele un poco el golpe en la cabeza, pero no es nada- le aseguro Jimin.
Jungkook se acercó de inmediato y sin pedir permiso inspeccionó la cabeza de Jimin, tenía una gasa con sutura pegada al cuero cabelludo y un poco de sangre seca adherida al cabello.
- ¡ Mierda me relaje demasiado!, pero eso no volverá a suceder- dijo con rabia Jungkook.
- No es tu culpa, nunca debí regresar sólo a los baños, ambos nos relajamos, creo que estoy perdiendo mi sagacidad y entrenamiento policial- dijo Jimin amargado y con impotencia.
Jungkook lo miró y vio que fruncía levemente su ceño e inconsciente llevó su mano masajeando la zona, cuando vio lo que estaba haciendo retiró rápidamente la mano y desvió la mirada.
- No te preocupes, fue suficiente, hablaremos con Hobi, necesitamos su ayuda- le dijo Jungkook.
- ¿ Tienes una mejor idea "fresita"?, debemos correr el riesgo, no nos queda de otra. - le dijo Jungkook mirándolo.
Jimin asintió, Jungkook tenía razón.
En eso la puerta se abrió y ingresó el doctor.
- Veo que ya estás aquí- dijo burlón- puedes llevarte a tu compañero, te daré algunos medicamentos para el dolor y para evitar que se infecte, no puede mojar su cabeza- dijo el doctor mientras buscaba los medicamentos para luego entregárselos a Jungkook.
- Gracias- dijo Jimin con amabilidad al doctor.
El doctor lo miró asombrado.
- Eso sí que es nuevo, nunca nadie me da las gracias, eso habla bien de tí muchacho, no te metas en más problemas- le dijo el doctor dándole la mano, Jungkook sólo hizo un reverencia y sacó a Jimin del lugar.
Jungkook no dejaba que Jimin hiciera nada, incluso le llevó la bandeja del desayuno, Jimin se sentía confundido, ¿ porqué Jungkook era tan protector?, para él era difícil asimilarlo, siempre se las había arreglado sólo, pero Jungkook saltaba todas sus barreras, y se estaba asustando de lo que comenzaba a sentir, tenía miedo de ahondar en los laberintos de su cerebro, mejor dejar las cosas tal como estaban y punto.
En el patio se reunieron con Hobi, Suga y Taemin.
- ¿ Es necesario que estén ellos presentes?- preguntó Jungkook indicando a Suga y Taemin.
- Sin ellos no puedo ayudarte, así que habla con confianza- le dijo Hobi.
- Bien, pero lo que les diga se queda entre nosotros- dijo Jungkook todavía no muy convencido de la presencia en la charla de los amigos de Hobi.
- Jungkook basta- le dijo Jimin tocando su brazo.
Jungkook suspiró y empezó a hablar contándoles la razón de que él y Jimin estuvieran en prisión.
Hobi pegó un sonoro silbido.
- Así como lo veo ambos fueron inculpados, en el caso de Jimin su jefe directo, el tal Nam-joon, está metido hasta el cuello, en tu caso Jungkook, creo que el único traidor posible es tu hermano Zion-T.
Jimin estaba pálido, sospechaba de su jefe, pero oír a otra persona decirlo, lo dejaba por el suelo.
- Debo comprobarlo por mi mismo, para eso necesito su ayuda- dijo Jungkook.
- ¿ Qué tienes en mente?- preguntó Hobi.
- Necesito salir de prisión y ver a mi Apa Jin- dijo Jungkook.
-¿ Hablas en serio?- preguntó Suga- ¿ Crees que es tan fácil?, Hobi eso es demasiado arriesgado. - dijo Suga molesto.
Taemin no dijo nada, pensaba cuidadosamente lo que pretendía Jungkook.
- Jungkook, en serio, eso va más allá de mis posibilidades.- dijo Hobi.
Fue entonces que Taemin habló.
- No es tan imposible, sólo debemos planificar con calma, tengo algunas ideas, pero necesito analizarlas bien- dijo Taemin.
- ¿ Hobi?- preguntó Jungkook.
- Está bien, mañana te diré si es posible.
- De acuerdo, pero con ustedes o sin, hallaré la forma de salir- dijo Jungkook con firmeza.
Luego todos se dispersaron para no levantar sospechas, como Jimin no podía correr se quedaron sentados mirando a los reos entrenar con la pelota.
- Todo lo que creí se ha desdibujado como si una mano invisible se diera maña en mostrarme lo equivocado que estaba. - dijo Jimin de repente.
Jungkook se quedó viéndolo.
- ¿ A qué viene eso "fresita"?- preguntó Jungkook mirándolo extrañado.
- Siempre tuve unos padres amorosos y preocupados de mi bienestar, me inculcaron valores y siempre ingenuamente creí que esa era la única forma de vivir, cuando cumplí ocho años unos delincuentes entraron por la noche a robar y mataron a mis dos padres delante de mis ojos, por más que les dijeron que no había nada de valor, los mataron igual, habría corrido la misma suerte de no ser por los vecinos que alertaron a la policía y tuvieron que huir, nunca se me va a olvidar los cuerpos de mis padres tirados en el piso y la sangre, no puedo sacar esa imagen y olor de mi cerebro, desde ese día no tolero ver u oler sangre, simplemente me desmayo, nunca se lo dije a nadie, tal vez pudieron haberme ayudado, un psicólogo, pero me cerré y lo guardé como un secreto.
- Lo siento "fresita"- le dijo Jungkook, pero Jimin estaba sumergido en sus recuerdos.
- Me llevaron a un hogar de menores, la familia de mis padres vivían en el extranjero, la casa y todo lo que teníamos se vendió y lo pusieron en una cuenta a mi nombre para que cuando tuviera mi mayoría de edad dispusiera de ese dinero, por lo menos en eso tuve suerte, pudieron haberme dejado sin nada...nunca fui problemático, así que no tuve problemas en el hogar, por lo menos me trataban bien, pero siempre extrañé el amor de mis padres, eso fue lo más importante que perdí, era estudioso y tenía buenas calificaciones y estaba decidido a convertirme en policía, se lo debía a ellos, no fue difícil así que lo logré, el único problema era mantener mi secreto, nunca fui bueno en las relaciones con otros y no tenía amigos, pero siempre fui leal con mis compañeros, ¿ te das cuenta?, ahora resulta que mi jefe directo me tendió una trampa.
- La vida es bastante cruel "fresita".
- La única persona que se ha preocupado por mí bienestar después de mis padres has sido tú, una persona al otro lado de la ley.
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