Capitulo 20. Despues de tierras frias, en camino a Arabasta

1K 146 10
                                    

Agarraba la sabana y me secaba las lágrimas, inclusive no era suficiente para secarlas, la doctora me dio unas palmadas en la espalda, haciéndome recostar, después de todo, la vida es difícil para muchos, y aunque siempre he deseado tener problemas normales, situaciones normales, pero podría tocarme ese tipo de situaciones.

—Chopper ha sido muy fuerte —comente cuando talle mis ojos antes de dormirme nuevamente.

Comenzó a haber bastante ruido, y no podía seguir descansando, hasta que abrieron la puerta, logré escuchar a Luffy hablar sobre el frio que tenía, a lo cual no podía evitar reírme, me senté, abrazando mis piernas, viéndolo ir de por ahí.

—¿Qué está pasando afuera, Luffy? —quise saber.

—Está muy frio ¿Oye trajiste mi chaqueta?

—No me contestaste —replicó un poco irritada, viéndolo sacar unas cosas del baúl.

—Estamos teniendo una pequeña pelea —señaló mi rostro viéndome ahora fijamente—, no te preocupes, tu solo descansa.

—¿Por qué no agarras la mía? —cuestionó señalando su suéter con tres rubies en un lado—. Es mejor que no llevar nada.

—Está bien... iré a golpear a esa gente ahora.

Intente descansar, por unos cuantos minutos, hasta que la idea de salir a pelear era un cuanto entretenida, pero también eso era una perfecta distracción para largarme de una buena vez de aquí. No necesitaba tres días descanso, con la medicina fue más que suficiente. Así que tome un abrigo, y mire los alrededores, por si aparecía el reno o la doctora.

—Tú debes ser una amiga del sombrero de paja —se aseguraba, después de haber reído muy alto.

—¿De que estas hablando? —pregunte desconcertada, seguramente era aquel tipo con el que peleaba Luffy, adiós al plan de escapar, tampoco era un buen plan enfrentarlo, podría lastimarme los brazos, que acaban de ser curados.

—¿De verdad?

—Si, solo pasaba por aquí... —intente que no se demostrara que andaba un poco nervioso—. Un gusto, adiós —intente entrar al cuarto, pero aquel sujeto subió por el pilar hasta donde yo estaba.

Notando que había mentido, comenzó a corretearme, tenía que moverme rápido, y bajando las escaleras, este se atoro, creí que estaba salvada por breves segundos, pero este comenzaba a comerse a sí mismo, cayendo del segundo piso hasta el suelo. Dio una vuelta quedándose un cuanto delgado.

—Que envidia —señale dejando que mis hombros cayeran, porque era la manera más rara de perder peso.

Este iba nuevamente por mí.

—¡Tú serás la primera en morir! —señaló cuando me aprensaba contra el suelo.

—Luffy —dije con alivio, cuando noté que su pie elástico había golpeado al sujeto ese, aunque también había roto mi chaqueta—. Oye ¿Qué le has hecho a mi chaqueta? —cuestione un cuanto triste, tocando la manga que estaba completamente perdida—. Me costó demasiado confeccionarla, el cuero carísimo y además que el hilo que utilice, han sido tan caros.

—Lo siento Ruby, me lanzó una bomba.

Pero me rendi.

—Creo que debí haberme imaginado que no podrías volvérmela entera —comenté soltando un suspiro, ya dándole unas palmadas en el hombro—. Así que... cada vez que obtengamos un tesoro, toda la joyería que te toque será mía.

—¿Qué? ¡Así que era tu plan después de todo!

—¡Paren de decir estupideces! —ordenó aquel hombre con un tono de voz muy alto, que parecía que había usado un megáfono—. Detrás mía, hay una sala de armas, y solo yo tengo la llave para abrirla —señalaba la puerta de mármol—. ¡Dentro de esta sala hay, tantas armas que no pueden ni imaginarlo!

Has llegado al final de las partes publicadas.

⏰ Última actualización: Sep 14, 2022 ⏰

¡Añade esta historia a tu biblioteca para recibir notificaciones sobre nuevas partes!

La Pirata Escarlata (One piece x Oc)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora