La Pirata Escarlata (One piece x Oc)

Capitulo 3.

Luffy se rehusó a escuchar la historia de Nami, decidió tomar una caminata, aunque a mí, me gustan mucho las historias, y más cuando están basados en hecho reales, por lo que me sentaba nuevamente en el césped, esperando por la historia y anhelando una caja de palomitas.

—Escucharemos que es lo que nos tienes que decir —dijo el famoso cazarrecompensas, apoyándose sobre un árbol—. Aunque tu historia no cambiará para nada las cosas.

Sorprendentemente se quedó dormido.

—Es un tipo extraño, yo quiero escuchar —comente con entusiasmo—, me gustan las historias basadas en hechos reales.

—Ya veo —dice la chica divertida—, ahora entiendo porque Nami tiene problemas al tratar con ustedes.

{O sea no les voy a poner el flashback de la vida de Nami, para eso ya habran de leer o ver ustedes el manga/anime}

Así que, Nojiko nos contó toda la historia de ambas chicas, con todo y lujo de detalles, todo desde que fueron adoptadas, sus días en la isla, hasta aquel trajo día, que llegaron aquellos Gyojines, que tomaron la isla por las fuerzas, como era de esperar en los piratas, aunque ese sentimiento, me generaba un poco de rabia, había decidido tomar ese camino, tan solo por la aventura y hacer todo lo que quisiera, cuando quiera.

Los piratas decidieron pedir por pagos, y por un momento, su madre adoptiva se estaba salvando de pagar aquella cuota, por un momento, pero la cena que les prometió a ambas chicas puso en riesgo su vida, y eso que tenía una manera de salirse con la suya, e evitar pagar por ambas chicas, ya que no andaban en los registros, pero Bellemere, su madre, en ningún momento negó sobre su parentesco, a pesar de todo.

Eso fue todo, dándole un último abrazo a la mujer, la vieron morir enfrente de sus ojos. Luego, se llevaron a Nami, para que trabajase para ellos, con la promesa de realizar mapas marinos para ellos, hasta que pudiera comprar el pueblo Cocoyashi.

Entonces, todo comenzaba a cuadrar en su expresión y petición, aquella historia, le había conmovido tanto, que no había podido evitar llorar.

—¿Estas bien? —me preguntó Nojiko.

—Ha sido muy difícil para ella —respondí tallándome la cara, mirando a los demás chicos—. Odio que la gente se aproveche de los débiles, y como ahora Nami, también es mi nakama, pues... —no pude terminar de decir que iba a combatir contra ese Arlong, porque la chica me había dado un golpe en la cabeza—. ¿Por qué has hecho eso?

—Les conté esto para que no hicieran cosas estúpidas —se justificó, mientras me sobaba la cabeza—. Si arman un alboroto por aquí diciendo que son amigos de Nami, los piratas comenzaran a desconfiar de ella y todo lo que ha hecho durante ocho años no habrá servido de nada.

» Por eso les estoy pidiendo, no hagan nada que pueda herirla.

—Entiendo que es estar luchando sola —me levantaba de mi lugar—, pero ella, ya no está sola, Nojiko, ahora nosotros somos sus nakamas, y para eso estamos, para evitar que salgan heridos.

—¿Ahora eres parte de nuestra tripulación? —preguntaba el narizotas sorprendido, me señale el rostro con desconcierto.

—Si... a menos, que no quieras, lo comprendo —fingí cierto melodramatismo—, mi cabello rojo, suele hacer que la gente ponga, malos augurios alrededor mío... tendré que volver a navegar sola... sin comida y agua...

—No, está muy bien que seas nuestra nakama —interrumpió Usopp extendiendo una sonrisa, evitando que fuera por más—. Soy el capitán Usopp, francotirador.

—Soy Ruby, forjadora de armas —apretaba su mano con una gran sonrisa—. Ahora, vamos por la cabeza de ese Arlong.

Encontramos a Luffy en el pueblo, estaba sentado, se veía muy relajado, tal vez y porque no escucho la historia de Nami, intente contársela, pero no me dejo siquiera hablar, así que como niña regañada y por falta de que me cumplan mi capricho, me senté y observe el gran escándalo que se armaba en el centro de este pueblo.