Jimin siempre amo su trabajo, era lo segundo que más amaba después de Jaebum. Pero ahora no lo hace.
Después de haber pedido que le dieran dos días libres, volvió a trabajar. En esos días, se relajó mientras acomodaba su nuevo departamento, leyó los libros que tenía archivados para distraer su mente y comió demasiado. Hace muchísimo que no comía lo que quería, Jaebeom siempre estuvo midiendo cuantas porciones de carne, arroz, o cualquier cosa podría comer. Su excusa era "que lo estaba cuidado" para que no vuelva a subir de peso a como estaba antes de que se casaran.
En fin hizo varias cosas en esos dos días, a pesar de disfrutarlo extraño bastante el hospital. Su trabajo era como su segundo hogar, estaba feliz de volver, pero ahora había un problema.
El problema fue que después de llegar y atender felizmente a sus pacientes, con toda la dedicación del mundo. Porque ama sanar personas, amaba verlos seguir disfrutando de sus vidas. Su hora de salida era hasta las cinco, pero él decidió quedarse más tiempo para ir a visitar a los pacientes que tenia internados, de tanto estar en consulta y reuniones del directorio, no le dio tiempo de ir a ver a sus otros pacientes. Estuvo ocupado todo el día hasta que se dio cuenta que ya habían pasado tres horas desde su hora de salida, suspirando se alisto para irse. Tomo el ascensor para ir hacia su auto, y fue ahí donde todo su buen día se fue al retrete.
No esperaba que su día terminará viendo a su infiel exmarido.
Todo estaba bien, ya tenía planeado lo que iba hacer llegando a su nuevo departamento, pero justo al ir por su auto apareció Jaebum con una expresión de cabreo a más no poder. Mirándolo ahora con aquellos ojos juzgadores que le da a Jimin, es cuando esté se pone a pensar: ¿Cuántas veces me has mirado así y yo ni cuenta me daba?
Jimin se detuvo en una distancia considerable con tan cerca ni tan lejos de Jaebeom. Ambos esposos se miraban fijamente, la brecha entre ellos era enorme. Ninguno quería ceder y dar el primer paso. Pero, como siempre Lim Jaebeom no quiere perder nunca, además de que él tiene que ser el dominante de la relación, como siempre sus amigos se lo andaba recordando.
—Al fin te encuentro, Jimin. —dice mientras da unos pasos más cerca de él.
—Hola, Jaebum.—contestó tratando de ocultar el hormigueo de miedo que estaba recorriendo su cuerpo.
—¿Eso es todo lo que dirás? —Jimin solo levanta los hombros—Jimin, te estuve llamando todos estos días. —Jaebum acorta la distancia, pone las manos en los hombros de Jimin para demostrar poder. Para poder someterlo. Jimin tiembla bajo su toque, no quiere tenerlo cerca suyo— ¿Dónde has estado? ¿Con quién? Sabes lo preocupado que estaba, nadie sabía dónde estabas metido, llame a todos nuestros amigos y nadie sabía de tu paradero. —"¿A todos nuestros amigos? Tus amigos. No míos" pensó Jimin mirando esos ojos que una vez creyó ser el único en ellos. No podía creer lo que escuchaba, le daban ganas de reírse, pero se aguantó—A parte esa nota que me dejaste ¿Qué significa? —pregunto zarandeándolo—¿No entiendo? ¿Esto es un juego?
No quería contestar.
No lo hizo. Eso hizo enojarse más a Jaebum.
—¡Contéstame! —le exige el infiel, mientras toma con fuerza los hombros de Jimin.
—¿No lo entendiste todo con la nota que te deje? —cuestionó Park tan tranquilo como pudiera aparentar. No tenía que dejar notar su miedo. En cambio, empezó a enojarse ¿Quién se cree este tipo? ¡Es un sinvergüenza! Pensó.
—¿Qué? Enserió esperabas que entienda algo con "Estamos ya grandes para explicarle al otro lo que sabe que está haciendo mal." ¿Qué mierda significa eso? — Jaebum se estaba desesperando. Sabia como era Jimin, era una rata escurridiza que al primer grito se escondía, así que, al principio trato de hablarle con amor. Dejando ir su enojo, lo tomo de los cachetes tiernamente. Cachetes que él tanto odiaba— ¿Qué hice mal? —susurro con esa voz horrible.

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Amarga Realidad
FanfictionCuando estás en una burbuja llena de amor y todo es de colores brillantes, una ilusión y sueño de gran amor. Pero todo eso se derrumba en un instante cuando descubres el engaño, que fue. El engaño con el que terminó muriendo el cuerpo, corazón y alm...