Adore You

21. Miénteme

El fin de semana pasó rápido porque había mucho trabajo, así que no tuve mucho tiempo para ver a nadie.

- ¡Españolita! Hoy fiesta porque he ganado. A las 20.00 en la habitación de Dani, iremos a un club de por aquí cerca.- Me gritó Max desde unos metros de distancia.

- Vaya, pues tocará fiesta, menos mal que me he traído algún vestido.- Le dije guiñándoles un ojo a él y a Alex Albon, quien le acompañaba.

Llamé a Carlos para preguntarle si se acercaba a mi habitación para ayudarme a elegir el outfit y a los cinco minutos estaba llegando a mi puerta.

-Hola guapetón, ven, tengo un dilema. El vestido negro, o el blanco.- Me probé los dos

-Madre mía, qué pibonazo.- Me sonrojé - Pero el blanco sin duda, estás preciosa Lau, déjate el pelo con la coleta, estás perfecta. 

-Ay Carlitos, no me digas eso que me pongo roja.-  Dije tapándome la cara con las manos

Me terminé de preparar, cogí el bolso y nos fuimos hacia la habitación de Dani. Allí estaban ya esperándonos Max y Daniel, y a la vez que nosotros llegaban Charles, Pierre y Alex. 

- ¿Quién eres tú y que has hecho con Laura?- Dijo Daniel mientras me daba la mano y me daba una vuelta para mirar mi vestido.

- WOW, estás increíble, vaya cambio- Dice Alex.

- ¿Me estáis diciendo que normalmente no estoy guapa?- Les pregunté con los brazos cruzados y las cejas arqueadas.

- Yo siempre te he visto preciosa- Dijo Charles mientras se acercaba a darme un beso en la frente.

- La más bonita de todas- Confirmó Carlos.

- No me malinterpretes, es que el uniforme de McLaren no te hace justicia. - Intentó justificar Albon.

-Que sí, que está buenísima, pero vamos hacia el club a por unos cubatas que es lo importante- Dijo Max y todos nos reímos mientras comenzábamos a caminar en dirección a la salida del hotel.

De camino al local, al que llegamos en una furgoneta privada, Albon y Max bromeaban acerca de alguna tontería que Daniel había dicho mientras Charles y yo hablábamos con Carlos sobre su futura temporada juntos y lo mucho que iba a echar de menos a Carlos en McLaren.

- De verdad Laura, sí tanto de menos me vas a echar vente conmigo a Ferrari. Ya sabes que podemos tener una persona dedicada a cada piloto que es de libre elección. Trabajarías para la jefa de prensa de la escudería pero serías la que viene conmigo a todas las entrevistas, como hasta ahora. De hecho hasta podrías hacerlo con Charles también, total, ya lo haces con Lando.- Soltó de repente mi compañero español.

- Carlos, si me voy contigo y con este- dije señalando al monegasco- a Ferrari, Lando no vuelve a hablarme más en su vida.- Sentencié. Aunque realmente era una buena idea, así se arreglaría todo. Yo seguiría en la F1 y podría salir con Lando oficialmente.

- Bueno mon coeur, eso sería un poco egoísta e infantil. Si en Ferrari te dan una oportunidad mejor, teniendo en cuenta lo bien que te llevas con los dos pilotos, no tendría porqué enfadarse.- Me dijo Leclerc mientras pasaba un brazo por mi espalda.

- Tú te estás escuchando Charles? Estamos hablando de Lando, que me ha dejado de hablar por cosas más absurdas. Además, no es que Ferrari me fuese a dar una oportunidad mejor, es el mismo trabajo que ya estoy haciendo en McLaren y no es que me lleve bien con vosotros o no. También me llevo bien con él y con Dani. Y sabéis que Lando me dirá que me voy por ti, no por Carlos. Ya sabes lo celoso que se pone y sobre todo si se trata de ti, que ya tenemos un historial.- Dije asombrada de que nadie se diese cuenta de lo absurdo que sonaba el plan.

- Celoso se pondrá, pero tiene una novia que le espera en casa, te lo recuerdo por si se te olvida, que parece que le estás defendiendo con demasiadas ganas.- Me dijo Carlos, que no estaba al corriente de la situación entre Lando, su novia de pega y yo.

Seguimos unos minutos más discutiendo sobre eso hasta que llegamos a la discoteca. Daniel se aseguró de que todos dejásemos nuestros abrigos en la entrada y que llegásemos al reservado que Max nos había preparado por su reciente victoria. Allí nos estaban esperando ya Lando, esta vez sin Giulia,  y Max Fewtrell.

-Wow, chicos donde habéis dejado a las damas? Soy la única mujer aquí.- Dije asombrada, ya que la mayoría de ellos tenían pareja.

- Eres la única chica a la que queremos ver a todas horas- Dijo Daniel intentando adularme.

- She's my girl Daniel!- Dijo Lando. Por dentro chillé, por fuera intenté controlarme. 

- Tu ya tienes novia hermano, deberías dejar que Laura se busque a alguno soltero- Dijo Fewtrell.

- ¿Como tú, no?- Dijo Verstappen riéndose mientras el otro Max asentía.

- Creo que estáis hablando de mi y yo soy muy feliz siendo la chica de McLaren.- Dije mirando a Carlos, para que diese por finalizada también la conversación de la furgoneta.

- Por ahora me parece correcta tu decisión- Dijo Carlos dándome un abrazo medio ladeado.

- Sí, bueno, pero la temporada que viene serás también mi chica entonces- Dijo Daniel.

- Sigo siendo el que tiene el contrato más largo con McLaren, así que es más mi chica- Dijo Lando.

- Creo que preferiría que Andreas y Zak se peleasen por mí antes que vosotros. Aquí huele demasiado a testosterona.- Dije apartándome de los dos y acercándome a la barra a por una copa.

Me pedí un Seagrams con tónica y me puse a bailar yo sola en medio de la pista. Leclerc se me acercó y empezamos a bailar juntos haciendo un poco el tonto, ya que era música electrónica. De repente la música cambió y empezó el reggaeton. Carlos vino rápidamente hacia mi y nos pusimos a perrear a ritmo de "tu me dejaste caer" de Daddy Yankee. Empezamos a grabar stories y la verdad es que nos lo pasamos genial.

Pero cuando "miénteme" empezó a sonar, Carlos fue a la barra y Lando se acercó a mi. Me agarró por la cintura y acercó su boca a mi oreja como si fuese a susurrarme algo. Me entró un escalofrío y empecé a cantarle. Sabía que él no tenía ni idea de qué decía la canción pero sentí que identificaba perfectamente le momento en el que nos encontrábamos. 

Realmente estábamos en otro universo, para nosotros era como si no hubiese nadie en la pista de baile. Solo él y yo, aunque de vez en cuando recibiésemos algún que otro empujón por parte de las otras parejas que bailaban a nuestro al rededor. El británico puso su mano en mi nuca y me besó, no sé cuánto tiempo estuvimos así, pero no mucho porque cuando quise darme cuenta Lando había agarrado mi mano y me susurraba al oído que nos marchásemos de allí. Yo asentí, no podíamos dejar que nadie nos viese así, se suponía que tendría que ser un secreto. Podría perder mi trabajo. Pero todo nuestro afán por irnos se vio truncado por la pillada monumental que nos habían hecho Daniel y Max.

- ¿Qué cojones acaba de pasar y a donde os creéis que vais? PERO TÚ NO TENÍAS NOVIA- Dijo el neerlandés con los brazos cruzados.

- Me esperaba cualquier cosa de ti menos que fueras uno de esos tíos que van poniendo los cuernos tío. - Dijo Daniel negando con la cabeza. 

Lando y yo nos miramos. Sabíamos que tendríamos que explicárselo todo.