El psíquico y la medium

Resolución de pensamiento

Señores, lamento no poder traerles mas contenido en cada capítulo, pero mi tiempo es corto y necesito darle mi atención a otras cosas por el momento, pero pronto lograré liberar espacio de mi vida cotidiana y tendré mas tiempo de escribir, les agradezco a todos por hacerme ver el nombre de Miko jaja. Acerca de que Mob puede hablar telepáticamente, hasta el fin del webcomic no demostró haber tenido una habilidad así, pero conociendo como es el personaje, bastará para que vea a alguien hacerlo y entenderlo para el poder replicarlo solo en el mismo dia. En fin ya fue suficiente aviso del autor, sin mas que decir se retira.

El silencio reino en aquél lugar que se rumoraba maldito, pudo escucharlo, como es que todos aquellos gritos y chirridos fueron callados en un instante por una fuerza abrumadora. El agarre de su mano sobre la mano de aquél chico seguía firme y seguro, pudiendo sentir su calor abrazar la palma de su mano y quizás era producto de su mente que producía aquella sensación de seguridad al hacerlo, sus ojos avellana seguían firmemente observando los negros de aquel estudiante frente ella, pudo notar que su mirada se encontraba en otro lado y no tardó en darse cuenta que era Hana la que estaba hablando con él a pocos pasos como si nada tormentoso y cardiaco hubiese pasado instantes atrás, era obvio, ella no podía ver nada de lo que sucedía.

—Ya que eres amigo de Miko ¿te gustaría acompañarnos en nuestra excursión?. —Preguntó con tono de voz dulce la chica radiante, dibujando una sonrisa pronunciada sobre sus labios regordetes.

Yulia observaba justo detrás de ella, desde el punto de vista del psíquico parecía que se estaba escondiendo, ¿qué era sensación? La chica no lo comprendía, al principio era con Miko cuando observó la facilidad con la que exorcizaba espíritus pero algo de este adolescente era diferente a la peli negra, no podía entenderlo de todo pero podía sentirlo, como si una presión sofocante hubiese ejercido fuera de su cuerpo en el momento que acabó con aquellas entidades malignas, le provocaba un ligera terror, admiración y envidia.

—¿Por qué ellos pueden lograrlo con tanta facilidad? ¿por qué no puedo ser como ellos?. —Se dijo en sus adentros con desesperación, sus ojos color sangre observaban aquél chico con cierta inseguridad, como si algo, su sexto sentido le advirtiese que mantuviera la guardia alta a su alrededor.

—Si no es una molestia, me encantaría. —Contestó el corte de hongo, dibujando una tenue sonrisa sobre sus labios, su tono de voz era tan sereno como solía serlo, sus ojos se movieron levemente hasta posicionarse sobre la rubia que apenas y asomaba la mitad del rostro detrás de la peli naranja. —Oh, eh... mi nombre es Shigeo, es un placer conocerte. —Exclamó de forma respetuosa, haciendo una leve reverencia hacia la chica.

La adolescente de baja estatura casi da un salto conmocionada, no esperaba que el pelinegro le dedicara la palabra tan pronto. Hana se giró levemente, observando a su amiga de subdesarrollada físicamente con un gesto entre confuso y serio.

—Yulia no seas irrespetuosa, Shigeo no te hará nada, es un buen chico así que saluda. —Exclamó con tono jubiloso, contradiciendo totalmente el gesto de reprima que quería elaborar.

—Eh-eh... ok. —Murmuró por lo bajo la rubia con adornos ropa de estampado de hongos, saliendo de la sombre de la peli naranja. —Mi nombre es Yulia, el placer es mio, Shigeo. —Elaboró como pudo, estar frente a un psíquico tan poderoso como el chico de pronto le causaba algo de vértigo, aunque el chico la estuviera mirando con esa diminuta sonrisa y ojos desinteresados. —Eh... deberíamos movernos si queremos llegar a la montaña. —Comentó con algo de incomodidad, ahora que su plan de ver el potencial de Miko había sido drásticamente alterado por este chico misterioso por el momento no tenía cabeza para pensar en más hazañas que le ayudaran a encarar a lo paranormal.