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Al igual que el anterior día, Ricky Bowen no se encontraba en su mejor momento; y Calíope lo había confirmado en el pequeño lapso de tiempo junto que habían pasado la tarde noche anterior y la mañana siguiente a esta, cuando el humor del chico cambiaba radicalmente tras ciertas situaciones, empezando por la cierta incomodidad que sentía cada vez que los padres de su novia compartían un tierno y pequeño momento romántico, continuado, cuando de regreso de una cita express, por la música que pasaban en la radio del auto de Calíope que claramente él no disfrutaba para nada, finalizando el grandioso día con el barista del Café Antidote no habiéndole comunicado que su oat milk latte se encontraba caliente.
Hoy, por ejemplo, luego de haber llegado a los pasillos de la escuela y de que el chico se diera cuenta a quien estaba a punto de enfrentar esa mañana, Calíope logró interpretar de que el chico comenzaría con la pequeña fase de alejamiento hacia todos quienes lo rodeaban en cuanto los dos entraron por la puerta del salón de teatro y Ricky sólo decidió quedarse
Sin embargo, para la suerte de ambos jóvenes, la mujer de dorados cabellos no se encontraba en la habitación, encontrándose así solo con los estudiantes del club de artes dramáticas ━ claro, aún con la excepción de Nini, Kourtney, Big Red y Brad ━ esparcidos por la gran habitación, charlando.
No pasaron más de cinco minutos de su llegada cuando la Srta. Jenn pasó por el umbral de la puerta con un pequeño cuaderno en su mano. Todos los estudiantes se sentaron en las gradas, y la mujer se paró frente a ellos.
─Cinco preguntas para conocer un poco mejor a sus personajes ─anunció─. Hoy quiero que cada uno de ustedes venga aquí y usen el método durante todo el ejercicio. Yo les haré una pregunta y ustedes contestarán en su personaje ─sus azules ojos viajaron por cada unos de los adolescentes; el cuerpo de Ricky se tensó levemente cuando la vista de su maestra cayó en él, a lo que Calíope tomó una de sus manos y la apretó con delicadeza. La Srta. Jenn quitó sus ojos del muchacho, para, finalmente, observar a EJ con una pequeña sonrisa─. Gastón, empecemos contigo.
El chico se levantó del asiento y se posicionó en frente de todos, mientras su prima aplaudía.
─Primera pregunta ─comenzó─. Si tuvieras que escoger un libro para vivir en él, ¿cuál sería y por qué?
