Lo que oculta tu piel

CAP 18

Me había enamorado de un espejismo

Draven

Ya que se pusieron al tanto de la situación entenderán mi reacción de esta mañana en cuanto la vi y que de con una cara absurda de payaso de circo.

Pero bueno, la vida para los demás no se detuvo, aunque para mí el transcurso del tiempo desde el callejón se ralentizó al máximo.

Espero que solo sea una etapa rápida.

O eso me trató de convencer mientras estoy sentado en la mesa del penthouse que mis "recatados" hermanos reservaron para nuestra estancia de último minuto, desde que supimos lo de mi madre.

Miraba pensativamente la taza de té frente a mi, mirando mi reflejo tambalearse en el líquido negruzco de aquel líquido medicinal que me ayudaba a tranquilizarme.

Sepa Judas como se llama pero por una extraña razón siempre lograba conseguirlo.

Tome un sorbo del líquido caliente, me relami los labios y lo siguiente que mi campo de visión pudo detectar fue a el mayor de mis hermanos entrar libremente a la sala, deprisa por buscar intoxicarse con algo de alcohol que calmara sus pensamientos.

Estaba a espaldas a mí y rápidamente vertió un líquido cobrizo en un vaso y se apresuró a beber el contenido.

- ¿La encontraste?.

Al parecer mi voz lo había tomado desprevenido, ya que dio un respingo como era habitual,ya que al parecer hasta sus sentidos se daban la libertad de ignorarme abiertamente, por lo cual nunca percibía mi presencia aún estado en la misma habitación.

- Si claro mira la traigo en el bolsillo- abrió uno de su bolsillos del pantalón como una pobre muestra de su ácido sarcasmo para disimular su reciente susto- Es tan diminuta que entra con facilidad.

Mire la taza entre mis dedos y una parte de mi quiso lanzarsela pero tuve que hacer uso de mi poco autocontrol para evitarlo.

Desde mi encuentro con Hell, él...había vuelto a tomar algo de ventaja sobre mí, lo cual no era algo que me complacía.

Y la presencia actual de Derian, no lo hacía algo muy fácil de combatir.

- ¿Así que esa es tu supuesta novia imaginaría?- comenzó acercándose unos cuantos pasos de mi ubicación con un vaso de whisky en mano- Pues déjame decirte que no está nada mal.

- Será mejor que te largues- advertí apretando mi agarre en la taza.

- ¿Por qué recién llego?- frunció la boca fingiendo incertidumbre- Aún te molesta que hablemos de tu novia ahora no imaginaría.

Continuaba acercándose a mí y sabía que cada paso que daba, una palpitación más fuerte en mi cabeza llegaba.

No lo dejes salir, Draven.

- Pues déjame decirte que tus gustos no son tan malos como pensé-

- Pensé que te aborrecía saber algo de mi, se supone que soy la mancha en tu perfecta reputación-

- Las manchas están hechas para resaltar lo que está bien hecho y solo pasan por error-

Sabes que si no me dejas salir no te devolveré el dominio.

Tu cállate.

- Pero ella es exquisita- se jacto el viendo que sus provocaciones daban fruto en mi lucha interna.

Maldito diagnóstico erróneo.

- ¿La tocaste?-

- Uff cuervito más que eso-