Capítulo XI

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No me odien, prometo que las cosas mejorarán ;) (Los que ya leyeron la historia cuando la publiqué tiempo atrás, lo saben jeje)

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—Puedo escuchar el sonido de la ambulancia.—

— Jimin, por favor despierta, hermano... por favor...

— Tío Jimin... deja de sangrar...

Puedo oír a mi hermano y a mi sobrino desesperados suplicando.—

Puedo oírlos, puedo sentirlos, pero no puedo verlos. No es que yo no quiera abrir los ojos; es sólo que no puedo. Estoy luchando por abrir los ojos y la boca, pero simplemente no tengo la energía suficiente. Incluso me pregunto cómo mi cerebro sigue funcionando con todo el dolor que estoy sintiendo—.

Sentí que mi cuerpo lo movieron a algo más suave, oí el golpe fuerte de puertas abriéndose y los pasos apresurados hacia mí. No necesito abrir los ojos para saber que me están llevando a urgencias. Las voces de pánico del médico es todo lo que necesito para saber dónde estoy.—

— Emergencia en el nivel uno. Se necesita a la Doctora Kim Hyuna. Emergencia en el Nivel Uno, se necesita la Doctora Kim.

— ¡Ayuda! Por favor, salva a mi hermano y su hijo, ¡por favor!

— Estamos haciendo lo mejor que podemos para salvarlo, pero señor, por favor tiene que estar fuera de la habitación.

—De repente, no puedo escuchar la voz de Jungwon o Jungkook, sólo puedo escuchar el sonido continuo de las máquinas a mi alrededor y las tres mismas voces desconocidas de los paramédicos. Luché por abrir mi boca y gritar el nombre de Jungkook. Estoy aterrorizado. Estoy herido, estoy sangrando y estoy solo con esta gente que no conozco. ¡Mierda! ¿Qué va a pasar conmigo?—

— ¿Cuál es el estado del paciente?

— Park Jimin, edad veintiocho años, cinco meses de embarazo.

— ¡Mierda, está embarazado! Necesitamos a la Doctora Kim, ¡encuéntrenla!

Oí la puerta abrirse y cerrarse de nuevo. Sentí la brisa fría en mi cuerpo que ahora se encuentra desnudo, y entonces sentí un punto de metal fino perforando a través de mi piel.—

— ¡Tenemos los latidos de su corazón!

*Beep*

*Beep*

*Beep*

*Beep*

— ¡Joder! Necesitamos dos latidos... ¡necesitamos los latidos del bebé!

—¿Mi bebé? ¿Qué le está pasando a mi bebé? Oh, por favor, no dejes que nada le suceda a Pickles. Y entonces sentí que alguien usó su dedo para forzar la apertura de mi ojo derecho, luego mi ojo izquierdo, al mismo tiempo vi una luz cegadora blanca dirigida a mis ojos, pero yo sabía que no estaba reaccionando a la luz—.

— Señor, el paciente no responde.

— ¡Maldita sea! Preparen el desfibrilador y estén preparados para cuando el ritmo cardíaco se detenga.

— Sí, señor.

Estoy empezando a perder la consciencia de nuevo, pero estoy luchando, necesito saber qué va a pasar con mi bebé. Tienen que salvar a mi bebé, tienen que hacerlo—

Want to want me. YoonminDonde viven las historias. Descúbrelo ahora