CAPITULO 25: LA FIESTA

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Con el paso de los meses, días y semanas, me reencontré con Stefany en Colombia, y decidí pedirle que fuera mi novia, ella acepto y ambas estábamos felices por ello, decidimos dejarlo fuera del ojo público por más difícil que fuera, ya que ella no quería que la gente se interpusiera en nuestra relación y tener que estar evitando peleas absurdas por temas que ni existen.

Nuestra relación iba muy bien, aunque no estábamos juntas la mayoría del tiempo estábamos bien, aunque fuera difícil salíamos adelante, yo pensaba que relaciones a distancia no eran tan difíciles, pero cuando hay inseguridades, pues claro es difícil, pero hay que aprender a salir de ellas; yo llegue a pensar que ella me era infiel, mi novia es muy linda y seductora, así que puede que tú la veas hablándote pero yo siento que te está seduciendo, eso uso conmigo, y se le da bien, así que me daba miedo perderla, pero aprendí a dejar mis inseguridades y celos a un lado.

Es la primera vez que me siento tan insegura en una relación...

Dos años más tarde me entere que Madelaine andaba con un chico llamado Travis, y tenían dos años saliendo, ella jamás me había contado y tampoco me había fijado en ello, estaba feliz por ella, no la juzgo y la apoyo, pero si tenía la duda sobre el ¿por qué no me dijo?, pero está bien, ella tiene una relación y yo tengo la mía.

Una tarde decidí hacer una fiesta en mi casa, invite a Madelaine y a Travis, Vanessa, Camila, Charles, Sofía, Lili, Cole, KJ, Clara (la novia de KJ), etc. Compre bebida, comida y botanas; teníamos tiempo sin hacer una fiesta, así que creí que era justo tener una, y aparte de ello quería conocer a el novio de Madelaine en persona, solo lo conocía mediante fotos y escuche algunas de sus canciones, pero tenía demasiada intriga; cuando llegaron todos entraron a la casa y nos dirigimos al patio, donde estaba todo arreglado, ellos se sorprendieron y sonrieron.

En un punto de la fiesta Travis se acercó a mí y me saludo.

-Hola, he escuchado mucho de ti, me alegro conocerte-. Me sonrió muy amable.

-Hola, yo no, pero soy muy chismosa y busque sobre ti, eres lindo y me encantan tus tatuajes de tus manos-. El miro sus manos y sonrió.

-Me alegro que hayas aceptado la invitación y realmente espero que hagas a Madelaine feliz, lo merece-. Ambos la volteamos a ver y ella nos miró feliz.

-Gracias por invitarme, lo haré, me trae loco y te agradezco por apoyarla, y haberla hecho feliz, es un ser con mucha luz-. Asentí.

Continuamos hablando de Madelaine, y después sobre la música, me comentó que quería que le ayudara con algunas canciones, yo asentí feliz.

Rato después me andaba del baño, así que subí a mi habitación y al entrar al baño, me relaje, estaba feliz con mis amigos y saber que mi ex esposa era feliz; terminando de lavarme las manos iba a salir, hasta que alguien me empujo dentro del baño y cerró la puerta con seguro.

-¿Sofía? ¿Qué estás haciendo? ¿Qué pas...- Me beso.

No me quite como debería hacerlo, proseguí ese beso, la tomé de la cintura y la pegue a mí, la cargue y la coloqué en la barra del lavamanos, nos besamos frenéticamente, como si nunca antes nos hubiéramos besado, sus labios sabían a fresa y eran canositos, besaba tan bien...

Bese su cuello y su perfume me envolvió por completo, olía tan rico; de un momento a otro le quite la blusa que llevaba, bese su cuello y pecho, ella tomó mi rostro y me beso, mientras nos besábamos me quito la playera y yo tomé su pantalón, lo desabroche y se lo quite, toqué su pecho y mientras nos besábamos la mano que tocaba su pecho bajo rápidamente, en un abrir y cerrar de ojos, Sofía ya estaba suspirando para intentar no gemir, pero en ciertas ocasiones le fue imposible.

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