XIV. Primera cita

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Jisoo junto a Rosé partieron al lugar que la rubia había mencionado con anterioridad

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Jisoo junto a Rosé partieron al lugar que la rubia había mencionado con anterioridad.

La menor no supo de donde logró sacar fuerzas para caminar sabiendo que su cuerpo dolía. Pero claro que antes había tomado el analgésico. La próxima vez trataría de controlar el lado salvaje de su chica rubia, aunque aquello lo deseara más su mente que su cuerpo.

En definitiva Jisoo luchaba con su subconsciente cada vez que podía, ya sea por una tarea dada o una composición nueva.

—Deja de pensar tanto, dañaras tu pobre cabecita más de lo que está.

—¿Qué? ¿Eh?

Rosé no evitó reír, desde que habían subido al auto, notó como Jisoo tenía un viaje astral tal como le pasaba constantemente a ella.

—Desde que subiste, tu mente viajó a otro mundo.

—No es cierto— Jisoo bufó cruzando sus brazos.

—Claro que sí, dime ¿qué se estaba debatiendo en esa linda cabecita tuya?

—No es tu incumbencia, Park.

—Por supuesto que lo es, Kim.

Jisoo se rindió ante la mirada de cachorro que la rubia le dirigió, no se podía resistir a esos ojitos.

—Sí prometes que no te burlarás de lo que diré...

—Lo prometo— Alzó su mano libre en señal de promesa sin apartar su vista de la carretera.

—Bueno... es que... es demasiado vergonzoso...

—Déjame ayudarte... Ummm... ¿Tiene que ver con algo relacionado a la universidad?

Jisoo negó y empezó a jugar con sus dedos. Entonces Rosé descartó aquello, ¿qué podría ser?

—¿Con tus amigas?

—Nop...

—¿Nuestra familia?

—Bueno... Puede ser.

—¿Algún problema con papá o tu madre o mi hermana?

—Nop.

—Entonces...

Jisoo sonrió un poquito avergonzada al tocar sus mejillas sonrojadas, desvió su mirada a la ventanilla y dejó con incertidumbre a Park, no le diría nada hasta llegar a su destino.

La rubia suspiró rendida, aunque ya tenía una idea de lo que pasaba por la cabecita de su chica. Sin mencionar nada más, ambas disfrutaron el resto del camino entre risas o acontecimientos pasados.

—Y llegamos...— Pronunció al observar la cabaña cerca de la colina, esta estaba muy escondida entre árboles. Jisoo tardó un poco en visualizarla.

Eres la música en mí | Chaesoo Donde viven las historias. Descúbrelo ahora