Nuestro Secreto

Secreto#17_Amigos.

Yohan.

_¿Quieres que te traiga algo para el frío?_ su mirar todavía sigue perdida en en la ventana desde que llegamos. La noche ha caído en la ciudad,  después haberla encontrado en un parque decidí por mis propios medios llamar a Elios y decirle que se devolviera.

Idiota.

Fue la última palabra que me dijo antes de colgar enojado por hacerlo perder su tiempo, suspire al verla sentada en esa silla viendo hacia la nada, mis sentidos tenían unas ganas de abrazarla por la espalda y decirle que todo estaba bien.

Cuando la veo levantarse para alejarse de nuevo me escondo entre los arbustos alerta para que no note mi presencia.  Un pequeño niño aparece detrás de una pelota, ella se lo entrega con una sonrisa feliz forzada.

_Que bonita es la niñez...

Dice antes de que se frene en seco pensativa de nuevo, luego de eso ni me acuerdo que sucedió. Solo sé que al verla decir al aire que no me necesitaba senti que todo mi mundo se desmoronaba.

Dudé.

Dudé mucho en decirle algo o no, tenía miedo de que volviera a huir. Sin más pensarla miles de escenarios pasaron por mi mente al darme cuenta como poco a poco se alejaba.  Al final pude decirle lo que tenía en el corazón, y al verla como ella misma inició el abrazo pude darme cuenta que siente lo mismo.

Alguien con quien apoyarse el uno con el otro, un amigo que pueda hacerla reír y nunca llorar. La abrace hasta donde más pude para que no desapareciera, después de varias lágrimas aceptaría el hecho que aunque doliera, encontraría la manera de que encuentre al amor de su vida.

Que sea feliz, aunque no sea conmigo.

Respiro profundo antes de ir a la cocina de mi apartamento, llamé a mi tío con la intención de que dejara nuestra relación en paz.

Tuve demasiados antibajos cuando llamé el taxi para recogernos, lo más tierno que me pareció de su presencia fue la increíble manera de apegarse a mi. No quería soltarme en ningún momento. Todavía siento sus manos alrededor de mi cintura como un pequeño oso panda.

_Para de pensar en eso..._ susurro despacio antes de abrir la nevera y sacar una barra completa de chocolate colocándole en la barra listo para hacer una bebida caliente._ Debería centrarme en apoyarla, no en enamorarla._ meto el chocolate congelado en un sarten esperando a que se derrita.

Volteo buscando a Emma quien sigue mirando la nada y suspiro.

_Va a ser mas difícil de lo que pense..._ me concentro en terminar de hacer el chocolate caliente, oh bueno creo que así se hace._ Tendré que encontrar un pasatiempo y para Emma también.

Todavía no tengo claro lo que ha pasado, ella tiende a ser muy cerrada al momento de verse tan frágil y de cierta manera trato de entenderla. El amor que nunca ha recibido fraternal have que las personas cambien, y en especial cuando una de esas personas que más confiabas te dice mentiras.

Desconfianza.

Esa palabra llega a mis oídos como si fuese un remolino de emociones, suspiro pensativo al darme cuenta que tengo que comenzar con algo muy simple y es eso. A lo mejor pueda tratar de devolver a la Emma que era antes llena de vida sin tener que involucrar los sentimientos míos de por medio.

_Supongo que es un buen plan..._ digo colocando una mano en el mesón y mirando el sarten  a fuego lento.

La otra sería comenzar desde cero y le digo que cumpliré con su sueño de conocer a Elios y que se devuelva a su pueblo natal.